La ciudad de Requena vive durante estas fechas sus días más intensos con motivo de la celebración de la Fiesta de la Vendimia. Con un denso programa que incluye más de sesenta actividades, el municipio viste sus mejores galas para recibir la llegada de miles de visitantes.
Entre los actos más multitudinarios de cuantos se celebran durante esta semana se encuentra la popular Noche de la Zurra, que tendrá lugar en la noche de mañana martes —previa exhibición de reses bravas en la plaza de toros— y recorrerá las principales arterias del casco urbano a ritmo de charangas. Otro de los momentos más esperados se producirá durante la mañana del jueves 28 con la celebración del Rali Humorístico, en el que cientos de jóvenes «customizan» sus vehículos para afrontar las pruebas más variopintas.
Las tradiciones y el vínculo con la vendimia serán una constante durante todas las jornadas. La vendimia de las primeras uvas, el pisado y bendición del primer mosto, las inauguraciones de los Monumentos Alegóricos a la Vendimia (que manarán incesantemente vino hasta el fin de fiestas), las noches del Labrador y Del Vino o los distintos homenajes a colectivos y personalidades darán solemnidad a unos festejos en el que no faltarán la pólvora y la gastronomía.
Para las noches de verano en Requena quedan reservados los principales reclamos musicales, con contínuas sesiones de baile, verbenas y disco-móviles. Además, para el este jueves a las 21 horas está anunciada la actuación de María Parrado, ganadora de la primera edición del programa de televisión La Voz Kids, que ofrecerá en la plaza de toros un espectáculo para toda la familia.
Así, acto tras acto, festejo tras festejo, llegará la jornada del domingo 31, marcada como fin de fiestas en Requena con un intenso programa que se abrirá por la mañana con la Ofrenda de Flores y Frutos a la Virgen de los Dolores. Por la tarde, la céntrica avenida Arrabal se inundará de confetti al paso de las carrozas y comparsas de la tradicional cabalgata; y llegados a la medianoche, el fuego reparador devorará con sus llamas el Monumento a la Vendimia, dando por finalizados los festejos requenenses.
