Cuatro días antes de que se celebre la "plantà" y con los principales "ninots" de los monumentos recién descargados del camión y embalados en plena calle, dos fallas fueron atacadas en Valencia. La primera -la falla Molinell-Alboraia- cuenta con graves daños en la base del monumento tras el incendio provocado "por un hombre de entre 45 y 50 años, con el pelo blanco". Esos son los datos que investiga la policía tras el aviso de una vecina que vio cómo a las doce y cuarto de la noche, un desconocido con esas características se acercaba y le pegaba fuego al plástico que envuelve los monumentos. Las llamas se propagaron con rapidez y arrasaron la base del monumento, y los laterales de dos de los "ninots" principales que, sin embargo, se pueden recuperar.

La otra comisión atacada fue la de la Fallera Mayor Infantil de Valencia 2012, Rocío Pascual, -la falla Santa Genoveva Torres-Arquitecto Tolsa, conocida como "la nova d'Orriols"- que, eso sí, no sufrió daños gracias a la rápida intervención del guarda de seguridad que se apresuró a detener a dos jóvenes que intentaban prenderle fuego a un "ninot". "La policía ha encontrado a los dos jóvenes implicados que, al parecer, son italianos que viven en la calle o que no cuentan con domicilio fijo", afirmó el concejal de Fiestas, Francisco Lledó, que no dudó en acercarse hasta las fallas atacadas para mostrar su solidaridad a las comisiones y ofrecerles la ayuda de la Junta Central Fallera (JCF). De entrada, el edil de Fiestas envió a los servicios de limpieza "para que, al menos, no tengan que limpiar los falleros los restos del monumento quemado", explicó a Levante-EMV.

La Fallera Mayor de Valencia, Sandra Muñoz, también quiso mostrar su apoyo a las comisiones implicadas, y más si se tiene en cuenta que una es la de su homóloga infantil y la otra la de una de las componentes de su corte, concretamente la de Ángela Ballester. "He querido venir a mostrar mi apoyo a la comisión ante un hecho tan lamentable como este", afirmó la Fallera Mayor de Valencia 2012, Sandra Muñoz. Respecto a la época de su reinado -que coincide con protestas diarias en la plaza del Ayuntamiento, a la hora de la 'mascletà'-la máxima representante de las fiestas afirmó: "soy la Fallera Mayor de Valencia, soy la fallera de todos y es una fiesta que tenemos que disfrutar todos al margen de lo que esté pasando actualmente. Es verdad que son tiempos difíciles para todos pero vamos a tratar de vivir nuestra fiesta y de sacarla adelante lo mejor posible". La pequeña Rocío, sin embargo, no acudió a la visita porque se encontraba en Castelló. Además, el concejal Lledó destacó que los hechos -aunque se sucedieron prácticamente a la vez- responden a actuaciones aisladas "que esperemos no se vuelvan a repetir".

A rey muerto, rey puesto

En el cruce de la calles Alboraia y Molinell los falleros no habían perdido la sonrisa del todo. Y es que a rey muerto, rey puesto. Por ello, el artista fallero ya está trabajando a contrarreloj para realizar otra base "que no será la hucha que se ha quemado -que simulaba un cerdo- pero que nos hará apaño. No quedará igual, pero no podemos hacer otra cosa. Le hemos dicho al artista que si necesita ayuda de cualquier tipo, allí estaremos. El objetivo es que la fiesta continúe porque no nos la van a amargar. El artista ya ha venido y ha tomado las medidas para ir trabajando", afirmaron desde la falla Molinell-Alboraia.

Eso sí, ayer mismo, la falla contrató los servicios de un vigilante de seguridad para mantener su monumento a buen recaudo. "Teníamos contratada vigilancia privada, pero a partir del día 15 que es la 'plantà'. Hoy mismo -por ayer- hemos contratado los servicios de otra empresa para estos tres día", añadieron desde la comisión.

Y es que año tras año no hay Fallas donde algún "ninot" no sufra ataques, o sea sustraído. Sin embargo, este año los incidentes se han adelantado mucho más de lo habitual. Eso sí, sin que la ilusión de los falleros se resienta.

La vigilancia se contrata a partir del día 15

"La mayoría de las comisiones cuentan con seguridad privada o se organizan por turnos para vigilar el monumento", aseguró ayer el concejal de Fiestas, Francisco Lledó ya que los ataques a las fallas suelen ser habituales durante los días de fiesta. Eso sí, los contratos de seguridad se realizan, normalmente, a partir del 15, tras la "plantà". Ya sean comisiones más grandes, o más humildes.

Ahora bien, ante incidentes como los ocurridos ayer, Francisco Lledó no dudó en solicitar la colaboración ciudadana. "Los vecinos deben estar atentos y ante cualquier conducta sospechosa -que un vecino esté muy cerca del monumento o intente robarlo o deteriorarlo- deben avisar a la policía. La llamada de la vecina de la comisión Molinell-Alboraia fue determinante porque si no llega a avisar de los hechos el incendio habría llegado a mayores y las consecuencias habrían sido dramáticas", concluyó el edil de Fiestas.