Tras una primera parte de corrida tediosa y plana, en la que apenas hubo motivos para aplacar el ansia orejera del festivo y bullicioso público de sol, en los tres últimos toros se desató definitivamente una desmedida euforia de pañuelos -incluido el del presidente- que derivó en un engañoso balance estadístico final.

En otro ambiente, en circunstancias menos jaraneras que las del domingo posterior a la "plantá", la corrida se habría saldado con muchos menos trofeos y con aún menos entusiasmo, a tenor de la poca consistencia de lo que pasó realmente en la arena.

Pero Juan José Padilla, que se marcó en su primero una aleatoria vuelta al ruedo tras una incomprensible petición de oreja, encendió la mecha de la pirotecnia con un vibrante saludo capotero al cuarto toro, al que recibió a portagayola y al que luego instrumentó otras tres largas cambiadas de rodillas más en los terrenos de chiqueros.

Un buen tercio de banderillas, en el que siempre cuadró en la cara del de Núñez del Cuvillo, pareció que iba a ser el prólogo de una faena redonda, pero el animal, que embistió con vibración a los pases de rodillas con que la abrió el jerezano, al momento tomó rajado el camino de las tablas, donde se refugió sin remedio.

Aun así, tras una estocada de rápido efecto, se pidió y se concedió la oreja para Padilla, que no dejó de hacer guiños a los tendidos de sol, antes, durante y después de su medido éxito.

Otra oreja, también de muy poco peso, le dieron después a El Fandi por un espectacular tercio de banderillas, en el que volvió a hacer alarde de facultades, y por una faena destajista, plagada de docenas de muletazos vulgares, al bravo ejemplar que salió en quinto lugar.

De pie o de rodillas, el granadino amontonó pases y más pases a un toro de franco galope, que pedía más entrega y sinceridad como respuesta, mientras el público fallero acompañaba con palmas los sones del populachero pasodoble "Amparito Roca".

En tal tesitura, Daniel Luque poco tuvo que esforzarse para redondear el dispendio orejero, porque tuvo delante al toro más completo de la corrida.

El animal se movió incansable tras una muleta que apenas apuró sus buenas embestidas, al marcarle siempre trayectorias despegadas del cuerpo y sin forzarle a seguir los vuelos de la tela, precedidas siempre de cites de ventaja y muy poco comprometidos.

Más centrado y reunido en la parte final, Luque optó más por la cantidad que por la calidad en una faena de muy largo metraje que remató con adornos vistosos y una buena estocada. Claro que, entre la excesiva generosidad del público y en comparación con el balance de sus compañeros, era lógica la concesión de las dos orejas para el sevillano.

Lo mejor fue que, al menos esta vez, la presidencia acertó al sacar otro pañuelo más, el azul, para hacer justicia con "Relatero", el bravo toro de Núñez del Cuvillo.

FICHA DEL FESTEJO.- Toros de Núñez del Cuvillo, de desiguales volúmenes y hechuras, aunque todos de buena presencia y astifinas defensas. Corrida también de juego variado dentro de su medida raza, en la que destacaron quinto y sexto toro, los más completos. Al último. "Relatero" de nombre, se le dio la vuelta al ruedo en el arrastre.

Juan José Padilla: estocada caída (vuelta al ruedo tras aviso y petición de oreja); estocada (oreja).

David Fandila "El Fandi": estocada baja trasera (silencio tras petición de oreja); estocada trasera (oreja).

Daniel Luque: pinchazo y estocada desprendida (silencio tras aviso); estocada (dos orejas tras aviso).

La plaza tuvo más de tres cuartos de entrada en tarde primaveral.