El president de la Generalitat, Alberto Fabra, ha acudido hoy al balcón del Ayuntamiento por primera vez estas Fallas y ha disfrutado de una "magnifica" y "espectacular" mascletà de la pirotecnia Europlà cargada de musicalidad y rematada con casi medio minuto de apoteosis final.

Ha presenciado el disparo junto a la alcaldesa, Rita Barberá, los conselleres Manuel Llombart y Máximo Buch, el presidente de Les Corts, Juan Cotino, el general Javier Cabezas, responsable del contingente español en Afganistán, y los padres de la fallecida piloto María de Villota, Emilio de Villota e Isabel Comba.

Fabra, que ha asegurado que a partir de hoy no faltará ningún día al balcón, ha disfrutado de "una magnífica mascletà", de la que ha destacado la "fuerza y la energía" que transmite, así como la "necesidad de contar con ella para vivir con más intensidad la fiesta".

En su opinión, ha sido "espectacular" y ha confesado que se ha quedado "con ganas de más" pero que confía en que el pirotécnico de mañana "intente mejorar y ganemos todos".

Ha señalado que son muchas las razones para que las Fallas sean declaradas Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco, no sólo por las mascletàs y los monumentos, sino "por la gente, las comisiones y los que trabajan para que las personas puedan disfrutar".

"Esa es la magia de las Fallas: todo el mundo cabe, la ciudad se hace pequeña", ha apuntado y ha defendido la importancia de que haga buen tiempo para que las calles se llenen y la gente participe de la fiesta.

Pero el protagonismo en el balcón se lo han ganado los pirotécnicos Quico Martínez y Salvador Armengol, socios de Europlá, que han demostrado "sus tablas para conocer la sonoridad de la plaza", donde llevan disparando de forma ininterrumpida desde 1999.

La mascletà ha tenido un inicio "muy característico" de su empresa con secuencias muy rápidas y "arriesgando con los silencios", su "letimotiv", según ha explicado Martínez, y explotándolos "hasta el límite de crear una incertidumbre".

El cuerpo ha sido "muy potente", un "terremoto exquisito", según ha definido el propio pirotécnico, quien ha subrayado el final, "lo que más gusta al público: esos veinticinco segundos de apoteosis final extrema, con cierta musicalidad in crescendo".

"Solamente llevábamos 160 kilos de carga cuando el máximo son 275", ha defendido Martínez, que ha explicado que su departamento de I+D trabaja para desarrollar "artificios que, con menos calibre y disparados con tecnología, se puedan reproducir con sonoridades y potencia como la de hoy".

Tras el disparo, Emilio de Villota ha mostrado su agradecimiento por la invitación de la alcaldesa al balcón y por el gesto de la falla de Bolsería, que ha decidido indultar el ninot de su falla infantil con la imagen de su hija, fallecida hace unos meses.

"Nos lo hemos tomado como un reconocimiento a María que 'torna a alçar el vol' (vuelve a levantar el vuelo, como dice el lema de la falla"", ha señaldo el expiloto, que ha confesado que le ha impresionado la mascletà desde el balcón y que ha sentido "más vibración y ruido" que en un coche de Fórmula Uno.

Los prolegómenos del disparo de hoy han sido amenizados por la tuna de Derecho, ya habitual en el balcón algún día de Fallas y que, con sus tradicionales canciones, han hecho bailar tanto a Barberá como a Fabra.

Cruz Roja ha informado de que ha tenido que realizar un total de 106 atenciones durante la mascletà de hoy, de ellas, noventa por lipotimia, así como cuatro por heridas y tres por entrada de objetos extraños en el ojo, entre otras causas, y uno de los asistido ha tenido que ser evacuado a un centro hospitalario.