La Falla Cuba-Literato Azorín ha sufrido esta mañana una nueva desgracia. Tras la frustración por el verdicto de las calles iliuminadas y del reparto de premios de la Sección Especial, el remate de la falla grande se venía abajo parcialmente sobre las cinco de la madrugada cayendo desde su cúspide los elementos principales incluyendo la figura del aviador. A consecuencia de ello tambien quedó destrozada la figura central, una joven que quedó literalmente decapitada dejando al descubierto la estructura interna.
Un camion se llevó algunas de las piezas mientras el resto de los elementos permanecen en la falla. Una vez comprobado por la Policía Local, el perímetro interior ha sido abierto al público al considerarse que ya no ofrece ningún preligro.
La caída se justifica en la acumulación de agua en el interior de la extructura junto con el propio riesgo de la misma que incluía un caballete casi en ángulo recto. La falla es obra de Vicente Llácer y hasta el final estuvo en la pomada por el primer premio obteniendo el tercero. Según ha explicado Llàcer, el remate del monumento ha cogido mucho peso porque llovió durante dos días y el corcho actúa como una esponja, retiene el peso hasta que secarse por completo. Así, si la falla estaba diseñada para soportar 1.500 kilos en la punta, se estima que tras las lluvias estaba aguantando más de dos toneladas. "Al que arriesga le puede pasar esto, el que no arriesga y es una pieza encima de otra o es lateral no pasa nada, pero aquí es una pieza de 1.500 kilos y diez metros en el aire desde el eje hasta la punta", ha recalcado.
"Yo he arriesgado al cien por cien y no se me valoró ese riesgo ayer", ha lamentado el artista en alusión al reparto de premios, que ha agregado que, en realidad, el remate no se ha precipitado sino que se ha contraído hacia dentro, tal y como estaba previsto que hiciera en la 'cremà'. "Estaba todo preparado de taller con unas cintas para que cayera hacia dentro, nunca para los lados ni para fuera, para que no hubiera ningún tipo de riesgo en la 'cremà'", ha explicado.
Ya durante la planta se optó por prescindir de un enorme globo aerostático que debía coronar la falla. Anoche tras la deliberación de los galardones, el presidente de la comisión ruzafeña José Giménez explicó que la pasada semana «se mojó» y decidieron no ponerlo. «No quería correr ese riesgo», señaló Giménez, que apuntó que los bocetos «no se suelen parecer en nada a lo que hay en plaza». «Si quieren buscar una excusa la habrán buscado», destacó.
Además, también mostraba su descontento por eltercer premio conseguido, que les supo a muy poco. «Estamos resignados, no tristes ni enfadados. Estamos habituados», explicó , presidente de la falla ruzafeña, que esperaba mucho más que un bronce.
«Estamos bastante acostumbrados a escuchar que nos merecíamos otra cosa pero, pero, pero... siempre hay peros», destacó Giménez, que indicó que el resultado de ayer marca «un fin de ciclo», incluido el suyo al frente de Cuba - Literato Azorín. «Vamos a replantearnos los presupuesto porque al final parece que todo queda como debe quedar», comentó: «Para qué vamos a apostar por algo que no da resultado». Giménez, deportivamente, quiso felicitar en repetidas ocasiones a las fallas del Pilar y Convento Jerusalén.
En Convento estaban convencidos
En Convento Jerusalén - Matemático Marzal, que optaba ayer al segundo primer premio consecutivo, también había decepción. El presidente, Jesús Barrachina, señaló que la idea no era «quedar segundo». «Es muy bonito, pero este año lo tenemos muy claro», destacó Barrachina, que tildó de «enorme sorpresa» el resultado. «Como ya habíamos ganado una vez... ellos „El Pilar„ hacía mucho que no habían ganado», comentó Barrachina. También la lluvia obligó a Convento Jerusalén a apuntalar uno de los remates al darse cuenta Pedro Santaeulalia que había cogido agua. Tras una hora de interrupción, se reanudaron las visitas.
Donde si estaba contentos es en Exposició - Mícer Mascó. Su cuarto premio les supo a gloria. Gabriel Giménez explicó que se esperaban el galardón. «Era la quiniela más esperable», dijo.
