Ingresado en la habitación 408 de la Clínica La Salud de Valencia, Enrique Ponce evoluciona favorablemente tras el percance sufrido el pasado martes en la plaza de toros de Valencia.

El torero de Chiva pasó la primera noche en el hospital con las lógicas molestias, aunque sin fiebre, lo que a juicio de los médicos era una excelente señal.

Enrique manifestaba ayer su esperanza en una pronta recuperación. «Aunque me encuentro muy molesto, ya estoy pensando en torear cuanto antes. Tenía planteada una temporada muy bonita y ahora voy a tener que cambiar los planes. No voy a poder ir a Castelló, y ya veremos Sevilla y Madrid, porque estas lesiones de huesos son muy complicadas».

En unas manifestaciones a la agencia Efe, Ponce comentaba: «El toro me había avisado ya varias veces, y entré a matar siendo consciente de lo que me jugaba. Lo cierto es que ha sido un milagro que la cornada no fuera de mayores consecuencias. He vuelto a nacer, ya que el toro me metió el pitón por la axila y llegó hasta el cuello. Por suerte, la cornada no llegó a romper arterias y venas».

El equipo médico le revisó y tras explorar el estado de la herida, confirmó su buena condición. «La evolución es muy buena. La herida presenta buen aspecto y el drenaje está muy bien. Todo va satisfactoriamente de momento y no hay síntomas de infección y el torero está animado», aseguraba el doctor Fernando Carbonell.

En cuanto a la posible alta, Carbonell comentaba: «Posiblemente en uno o dos días le podamos dar el alta hospitalaria. El torero ha sido trasladado esta misma mañana a Madrid donde finalmente será operado de la fractura de clavícula.

Operación en tiempo breve

Sobre la intervención de clavícula a la que Ponce deberá ser sometido, Victoriano Valencia, su suegro y apoderado afirmaba: «Estamos hablando con diversos especialistas en consonancia con lo que nos dice el doctor Daniel López Quiles. La traumatología es una ciencia que tiene una gran especialización y estamos barajando la posibilidad de que finalmente sea intervenido por el doctor Ángel Villamor.

El apoderado agregaba que los doctores han dicho que la operación debe hacerse lo antes posible, para que la lesión no vaya a más. «Si puede ser, antes de que pase una semana de la cogida. Nos han comentado que es una fractura que está parcialmente desplazada, pero que necesita una fijación. Y quiero agradecer públicamente el excelente trato que ha recibido en todo momento Enrique por parte de los médicos de la plaza», señaló.