Que el acto acabara ayer bien pasada la medianoche es lo de menos, puesto que después aún se prolongó más con la sesión de fotos, la salida del pabellón y las fiestas organizadas en los casales. Es decir, duró hasta bien entrada la madrugada. Esto no pasará el próximo año porque la Junta Central Fallera tiene en mente trasladar el acto a la tarde del sábado y acabarlo a una hora, por ello, más razonable.