El concejal de fiestas, Pere Fuset, no va a ser impermeable a las críticas. Han bastado unos rifirrafes con el popular Félix Crespo (el último, antológico, en el Circulo de Opinión Bunyols de Brillants, a cuenta de su definición de la bandera, que le hizo perder la paciencia) y la aparición de noticias contradictorias para que haya contraatacado con una de las armas que mejor domina: las redes sociales. Ayer se convirtió en viral la noticia publicada por levante-emv.com: su «decálogo de trolas» que se han atribuido a su gestión y para las que relaciona toda suerte de desmentidos y matizaciones.

En un denso escrito, Fuset señala diez «leyendas urbanas» que tienen que ver prácticamente con todos los aspectos de la fiesta. Sólo deja un espacio abierto a que las verbenas no se acaben a las cuatro de la mañana «pero sólo en caso de días laborales, y ni siquiera el tema está sobre la mesa». También niega que vaya a haber «un falleródromo» para plantar todas las fallas en las afueras; que se vaya a prohibir la Ofrenda («eso es de premio de ingenio y gracia»). De la rebaja de las subvenciones se atiene a la prometida contrapartida para las verbenas y pirotecnia que compensan el dos por ciento perdido en iluminación; que se vayan a quitar «mascletades», que no se esté dialogando con los agentes sociales, que el himno de la Comunitat Valenciana se esté poniendo ahora sin letra «cuando siempre se ha hecho así y se puede ver en youtube», que se vaya a excluir a las fallas de las poblaciones, que no se cuente con los estudiantes de Bellas Artes para los carteles y que su partido, Compromís, sea «antifallero».