La lluvia no impidió pero sí dificultó ayer el disparo de la séptima «mascletà» de las Fallas de 2016 a cargo de la pirotecnia granadina Mª Angustias que llevó a cabo gran parte del disparo de forma manual „no mediante ordenador como viene siendo ya habitual„ para evitar fallos en el disparo. La lluvia que cayó ininterrumpidamente durante casi toda la mañana obligó a retirar varios cartones que se habían mojado. Durante la mañana hubo cierta incertidumbre en los alrededores de la plaza del Ayuntamiento de la ciudad por la lluvia y ante la posibilidad de que se tuviera que suspender el disparo. La lluvia no disuadió al público y, finalmente, dio una tregua en el momento del disparo, de potente y colorido final. El responsable de la pirotecnia, Luis Pérez, destacó que todo había salido «según lo previsto» pese a las inclemencias del tiempo.

Las falleras Mayores de Valencia de este año, Alicia Moreno y Sofía Soler, presidieron la «mascletà» desde el balcón del Ayuntamiento donde también estuvieron los representantes de las casas regionales y donde se pudo ver a los responsables de Mercavalencia „que ayer estaba de celebración por el aniversario de su traslado„ y a varios concejales del equipo de gobierno, entre ellos, el primer teniente de alcalde, el socialista Joan Calabuig, recién recuperado de una intervención de vesícula que le ha obligado a estar varios días retirado de la vida política. El alcalde, Joan Ribó, y otros concejales del gobierno local como Giuseppe Grezzi y Jordi Peris saludaron efusivamente a Calabuig, visiblemente más delgado tras su convalencia, y se interesaron por su estado de salud.

La lluvia ha provocado que este lunes hubiera menos público que otros días congregado en este enclave de la ciudad para presenciar la «mascletà», lo que se ha traducido en cero asistencias por parte de la Cruz Roja.