Haciendo «comboi», piña, como le gusta a Pere Fuset, el presidente de la Junta Central Fallera, las fiestas josefinas volvieron ayer a demostrar que quieren ser Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Lo hicieron con un recorrido festivo por el centro de la ciudad „un centro prácticamente saturado en pleno domingo de Fallas„ en el que estuvieron acompañadas de sus «primas», la Muixeranga de Algemesí y la Lonja de la Seda, ambas ya patrimonio de la humanidad.

Se trata de un acto nuevo en el calendario fallero y con vocación de permanecer en el tiempo, aunque ayer era evidente que el objetivo principal de la cabalgata que recorrió la avenida María Cristina y la plaza del Ayuntamiento era hacer fuerza y mostrar músculo para que la Unesco decida convertir las Fallas en Patrimonio de la Humanidad. El acto comenzó con una muixeranga en el interior de la propia Lonja de la Seda. Un patrimonio de la humanidad dentro de un patrimonio de la humanidad pidiendo otro patrimonio de la humanidad. Una auténtica muñeca rusa del reconocimiento que hizo las delicias de los asistentes a esa primera muixeranga en el interior de la joya del gótico civil valenciano mientras en el exterior se agolpaban los curiosos. Se repitió el acto, como no podía ser de otra manera, ya en la propia plaza del Mercat.

Fuset agradeció a las fiestas de la Mare de Déu de la Salut de Algemesí su asistencia a la cabalgata de ayer, donde también estuvieron presentes las danzas de Els Tornejants. Cada pocos metros, la comitiva se detenía y volvía a alzarse la muixeranga con un cartel que rezaba «Falles Unesco», ante los aplausos y las exclamaciones de admiración de vecinos y turistas. La intención de este nuevo desfile es hermanar las fiestas valencianas y poner en valor lo más relevante del patrimonio cultural inmaterial valenciano. Para ello, se aprovecha el escenario de una ciudad en fiesta donde ayer, en plena cabalgata, andar era prácticamente una misión imposible.

La recepción a la cabalgata fue muy positiva. Raro es el acto que se celebre en la calle en Fallas y no cuente con cientos de espectadores, sobre todo si se celebra en el centro y acudan a él las Falleras Mayores, Alicia Moreno y Sofía Soler. Pero la cabalgata de ayer rompió los moldes. Había espectadores que, sorprendidos, escuchaban la muixeranga y aseguraban que nunca la habían oído «en el centro».

Especialmente aplaudida fue la muixeranga que se celebró en la plaza del Ayuntamiento en un acto tan emotivo como esperado. Buena parte de la corporación municipal estuvo presente y no dudaron en inmortalizar con sus teléfonos móviles las torres humanas que se elevaron hacia el cielo de la ciudad en varias ocasiones. Fuset, evidentemente, estaba satisfecho y felicitó a los asistentes por el trabajo realizado durante toda la cabalgata.