Cuando asoma una fallera de la corte infantil de 2001, la partitura suena bien. Convertidas en adultas ya volvimos a ver a Carmen Sancho de Rosa, Begoña Jiménez, Carmela Borrás y Sandra Molins. Cuatro niñas de la primera década del siglo convertidas en dos falleras mayores de Valencia y dos cortesanas en la segunda década. Este año es finalista Teresa Estevens. En aquel año se recordaba que era prima de la fallera mayor infantil de 1995, Ana Belén Ferrer, con quien comparte el Chardí del segundo apellido. El primero es totalmente del Palmar. «¿Estevens? Está claro que es una castellanización de un nombre inglés. Cuando lo buscas en internet hay muy pocos y todos por aquí».

Cien por cien del Palmar: valencianoparlante cerrada y aunque está graduada en Magisterio Infantil y ya piensa en las oposiciones, echa una mano en el negocio familiar. ¿Qué restaurante del Palmar? «La Casota. Allí hago de todo: llevar la contabilidad, de camarera, limpiar... y hasta cocinar si es necesario».

Con 26 años ya le tocaba. «Y no puede ser mejor año: vino la Mare de Deu al Palmar y el Cristo fue a Valencia. ¡Y yo soy la fallera mayor!». El día de su elección circularon por la red fotos de ella recibiendo felicitaciones de las chicas de 2001. «Es que me quieren mucho. Aquel año nos marcó a todas por todo lo que aprendimos, la gente a la que conocimos y lo que, después, hemos vivido. Desde el año 2010 hemos empezado a ser falleras mayores... ¡y disfrutar de dos falleras mayores de Valencia y dos en la corte! Las hemos seguido y hemos hecho nuestras sus emociones, sus momentos y hasta la relación con sus familias».

Ahora le toca a ella tratar de saltar el último obstáculo. «Considero que tengo las mismas cualidades que las demás, sin puntos a favor ni en contra por haber pasado ya por ahí. Quiero simplemente participar en igualdad de condiciones. Si me dan la oportunidad les estaré eternamente agradecidos y me servirá para ganar como fallera y como persona».

Y pase lo que pase, todavía no lo tiene todo hecho en la fiesta. «He sido directiva, vicesecretaria, fallera mayor... pero me encantaría ser presidenta de la falla».