El mundo de las fallas se vio ensombrecido el lunes por la noche al conocerse el fallecimiento de uno de los presidentes más jóvenes del censo. Héctor Perales Prima, con apenas 41 años, los últimos como presidente de la comisión de Ramón de Rocafull-Conde de Alaquàs, fallecía al no poder superar una enfermedad que le afectaba desde hacía cinco años.

La noticia ha causado una honda conmoción, especialmente entre las fallas y los presidentes tanto del sector Malvarrosa-Cabanyal-Beteró, una zona con fallas de carácter muy fraterno, en el que todos los falleros se conocen, y también en la Agrupación de Fallas del Marítimo. Aunque Héctor arrastraba la enfermedad desde hacía tiempo, siempre quiso estar en los actos donde era requerida su presencia, incluyendo las presentaciones. Ayer se le reconocía como «una persona que se hacía de querer y que afrontaba con enorme entereza su enfermedad».

La comisión de Ramón de Rocafull, en el barrio Llamosí, se encontraba ayer desolada por la noticia, sobre todo teniendo en cuenta, además, que la comisión había elegido este año dos presidentes infantiles y que uno de ellos es su hijo.