No habrían cabido todos los protagonistas de la fiesta fallera que merecen estar en un cuadro de honor. El que cerró el acto institucional de celebración de la declaración como Patrimonio de la Humanidad tuvo, por lo menos, a falleras mayores y cortes del año y anteriores; falleras mayores y presidentes de juntas locales (Gandia, Torrent, Dènia, Alzira, Burriana...), artistas falleros „incluyendo al mítico «Pepet»„, la Interagrupación de Fallas, el equipo redactor y asesor del informe y la clase política. Y los discursos, en los que estos últimos hablaron excelencias de la fiesta fallera, algo que, seguramente, las bases de la fiesta querrán comprobar más adelante con hechos.

Mónica Oltra apeló a su condición de fallera (de la falla «El Cid», el apodo de su falla, cuyo nombre real es «Ángel del Alcázar») y a que «cuántas ciudades quisieran tener un tejido asociativo como son las fallas. Y nosotros, que lo tenemos, a veces no lo apreciamos. Sabíamos desde hace años lo que eran las fallas, pero que ahora la Unesco lo reconozca nos llega de orgullo».

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, destacó que «la Unesco ha hecho aquello que todos pensábamos que se debía hacer: reconocer una realidad, lo que merecí». Recordó que «en el pasado siglo XX hubo momentos muy difíciles para nuestro pequeño país del Mediterráneo y en esos momentos hubo personas que hicieron un gran sacrificio para que las Fallas continuaran vigentes. Y vosotros, falleros, sois el resultado histórico del trabajo de tantos años».

El mensaje del alcalde Joan Ribó fue que «en un mundo cada vez más global, las Fallas nos identifican como pueblo, nos hacen singulares, y es esa vivencia propia la que queremos compartir con el resto de la humanidad. Porque si Valencia es una ciudad abierta al mundo, ahora aún lo es más gracias a las Fallas»

Nada mas empezar, el concejal Pere Fuset recordó a «mis antecesores, que empezaron el proceso: Félix Crespo y Paco Lledó» „no asistieron, pero sí que hubo representantes del grupo municipal popular„ y también «al entonces vicepresidente Jorge Guarro, que tomó conciencia de la importancia y a los que ayudaron en la elaboración del expediente. Pero ahora reivindico inversiones, obviamente, pero sobre todo conocimiento y sentimiento para que esta oportunidad histórica sea aprovechada». La fallera mayor Raquel Alario apeló a «asumir los retos que tenemos por delante».

Se invitó a las falleras mayores de Valencia del periodo que duró el proceso: desde 2011. Sólo acudió Alicia Moreno, aunque Laura Caballero llamó para justificar su ausencia. Por contra, sí que estuvieron todas las infantiles. El acto, como tal, acabó a los sones de «Valencia». Curiosamente, no «El Fallero», que, aunque estaba previsto en el piromusical, habría sido más lógico. Después, ya tras los brindis, el presidente de las Corts, Enric Morera, se marcó sendos bailes con la consellera de Justicia, Gabriela Bravo, y con Mónica Oltra. Sin Crida por la lluvia, el remate tendrá que esperar.