El concejal Pere Fuset cambiará el secretario general de la Junta Central Fallera a partir del próximo mes de mayo, tras el pleno de constitución. El edil inicia de esta manera una profunda renovación de su directiva tras llegar al ecuador de la legislatura. Martínez Tormo, mano derecha del concejal en el máximo organismo fallero, paga de esta forma ser el responsable último de haberse dado a conocer las normas de convivencia de las falleras mayores de València -o, lo que es lo mismo, la obligación de firmara las 144 aspirantes unas normas que, ya existían su práctica totalidad en las anteriores legislaturas como documento interno-. Sin embargo, también acaba su mandato como uno de los responsables del expediente del que se valió la Unesco para declarar a las Fallas Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.