La historia de la corte de honor tiene su porción de estadísticas y récords por romper. Si Ana Bellver fuera elegida, ostentaría una marca extraordinaria: la fallera que alcanza el puesto de honor con más diferencia de años desde su primer intento. Porque la Ana que se entrevistará con el jurado en septiembre de 2017 es la misma que lo hizo en septiembre de 2008. Nueve años han pasado. El récord de preseleccionada en mayor intervalo ya lo tiene. «Recuerdo perfectamente aquello y también sé que va a ser una historia muy diferente. Recuerdo que iba muy nerviosa a todo. Tenía 19 años y no estaba madura. Ahora voy mucho más tranquila y con la idea de pasármelo muy bien. No pienso renunciar a nada, por supuesto. Lo que tenga que venir, que venga, pero lo afronto de otra forma, con menos presión».

Para optar a la corte ha vuelto a pasar por el trono de su comisión. «No me la imaginaba sin fallera mayor y eso es lo que iba a pasar. El día mismo del nombramiento me lancé a ello. Fue un "pensat i fet", aunque algo había dejado caer en algún momento. Mi suegro es el presidente y me apetecía mucho».

La preselección «fue una gran sorpresa para mi. Tengo que reconocer que salí muy contenta de la entrevista con el jurado, pero a la hora de la verdad hasta estaba sentada ligeramente detrás de otras compañeras, asumiendo que elegirían a otras más jóvenes...» Aunque con 28 años está lejos del podio de entre las más mayores de las aspirantes de este año. Las tendencias presentes.

De Visitació-Oriola dice que «es la falla de mi barrio. No sería de otra comisión que no fuera ésta. Incluso me he independizado y no me he movido del barrio, de mis cuatro calles que tanto quiero». Y, por consiguiente, de una falla que vive su particular calvario con el casal. «Si, nos renimos pero no podemos hacer actividades. Cada vez nos dicen que tenemos una "tecla" diferente. Como será el tema que para la presentación tuvieron que actuar los amigos de la falla Villanueva de Castellón porque nosotros no podemos ensayar en nuestro casal».

Ella misma fue la última preseleccionada de la comisión en versión adulta. Aunque hace poco han disfrutado de una niña, Celia Martí. «Es la primera que teníamos desde que Covadonga fue fallera mayor de València».

Con los grados de técnico superior en educación infantil y sociosanitaria (escuelas infantiles y geriátricos, los extremos se tocan), Ana trabaja de monitora de tiempo libre en Anima't Grup Ludic. «¡Nunca hemos ido a Calvestra!. Bueno, yo sí que he ido una vez...» cuando fue candidata. En septiembre repetirá.