El jurado que, el próximo sábado, elegirá a la corte de honor adulta de 2018 -y posteriormente a la fallera mayor de València- mantiene el interés en elegir personas especialmente preparadas para los retos y las exigencias del cargo en una fiesta declarada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad a cuya representación se le exige, cada vez más, ser la embajadora de la misma. Y si el año pasado ya se estableció el conocimiento de idiomas como un mérito a considerar, los jurados del presente ejercicio siguen esa línea. Recientemente, las 73 aspirantes tuvieron que afrontar una prueba de lectura trilingüe en castellano, valenciano e inglés, de otros tantos libros representativos de cada una de sus literaturas, cuyos pasajes tuvieron que leer durante varios segundos. Así mismo, las candidatas disponen de la opción de establecer conversación con un profesor nativo de inglés.
Los siete calificadores están realizando una serie muy intensa de pruebas, que está incluyendo una entrevista personal doble. El pasado fin de semana hicieron la prueba de exteriores por el centro de la ciudad y queda la despedida, que será en vísperas de la elección. El jueves, todas ellas están citadas para los ensayos en el pabellón de la Fonteta.
