El proceso de deshielo en las relaciones entre los representantes de la fiesta vivió ayer un nuevo episodio con la reunión mantenida por el concejal de fiestas, Pere Fuset, con tres directivos de la Interagrupación: Juan Bosco Miquel, Jordi Palanca y Guillermo Serrano. Una reunión que sirvió para tratar los términos del Bando de Fallas pero que tuvo como principal valor la reanudación de las tomas de contacto para tratar de que el sosiego se instale en las élites rectoras de la fiesta. No estuvo el presidente, Jesús Hernández Motes, pero sí tres personas de su equipo más cercano en lo que parece un gesto calculado. Falta por determinar cómo se va a diseñar el calendario asambleario, que actualmente mantiene la reunión ordinaria del 31 de octubre y, teóricamente, una asamblea extraordinaria para el 14 de noviembre, en la que se finiquitaría el Congreso Fallero, salvo que las cosas evolucionen en un futuro inmediato.

El Bando de Fallas confirmó uno de los dos grandes temas que afectan especialmente a las comisiones: el de las verbenas. Se mantienen los días y horarios de los últimos años: el «súper-sábado», que este año será el 10 de marzo, así como las noches del 15 al 18, con los horarios habituales hasta las cuatro. No se trató el tema de las carpas, que será el otro caballo de batalla (las comisiones no quieren menos que mantener los mínimos del año pasado, con una «plantà» gradual de los mismos, pero que garantice que, las que lo deseen, puedan tenerlas la noche del viernes 9, aunque eso provocará, por el calendario de 2018, una utilización nula de las mismas de tres días y medio). A las fallas se les ha anunciado que otra de sus preocupaciones, la recepción rápida de los permisos, se puede conseguir mediante una Declaración Responsable. También se va a tratar de fomentar el uso de productos autóctonos en las gastronetas, así como ser rigurosos con elementos como extractores, cocinas interiores y similar. También se pedirá a las comisiones que tengan en la puerta del casal la autorización de zonas, tal como tienen los bares con terraza, para las inspecciones lo tengan más fácilmente como herramienta de consulta.

Con este reunión finaliza la primera ronda de contactos con los agentes falleros, que se reanudarán para tratar de dar las premisas antes de que acabe noviembre, independientemente de que el bando se publique en febrero.