El Corte Inglés de Nuevo Centro acoge una nueva tienda de indumentaria tradicional valenciana. Siguiendo la línea establecida en el resto de centros de la ciudad, El Corte Inglés ha encomendado la gestión de esta línea a una firma de renombre. En este caso, a La Casa de los Falleros y su estudio, atelier Albaes.

El nuevo espacio ocupa una superficie de más de cien metros cuadrados en la segunda planta del edificio de Hogar. En su nuevo punto de venta, los clientes podrán adquirir desde complementos como peinetas, manteletas, mantillas y blusones hasta vestidos de fallera de los siglos XVIII y XIX, con cintas de seda, puntillas en las mangas en todos sus detalles, tanto de señora como para sus modelos infantiles. Los caballeros, por su parte, tendrán un lugar donde acudir para hacer realidad un conjunto exclusivo de colores, texturas y complementos, con sus detalles de solapas, chapines, mantas, monteras y bonetes.

Entre ellos diversas personalidades del mundo de la fiesta fallera, como la Reina Fallera y Reina Fallera Infantil de Burriana, Judit Pesudo Martínez y Ana Giménez Domingo respectivamente, que fueron las encargadas de cortar la cinta. Además de sus Cortes de Honor y Damas de la Ciudad, asistieron figuras de la cultura valenciana, como las Damas Vicentinas o el president de Lo Rat Penat, Enric Esteve. También estuvieron dos falleras mayores estrechamente vinculadas a El Corte Inglés: Adriana Polo y Gloria Martínez, de 2001 y 2008. Albaes-La Casa de los Falleros fue indumentarista oficial de la Junta Central Fallera a primeros de siglo. Muchos de los numerosos asistentes participaron en un sorteo de una tela de valenciana, un conjunto de manteletas y la confección a medida del vestido cuyos ganadores se conocerán próximamente.

Albaes y La casa de los Falleros inicia su actividad de diseño artesano y confección a medida de trajes de fallera y fallero en la década de los 60, de la mano de la gran empresaria valenciana Encarnación Albarracín, quien reformó y acondicionó su establecimiento (el clásico espacio de la calle Quevedo) en los años 90, en el centro de Valencia. El negocio lo ha continuado su hijo, Javier Niclós, con su esposa, Arantxa Gazulla.

La inauguración coincide prácticamente con el inicio de la nueva temporada, puesto que al acabar las Fallas de 2018 empezará rápidamente el nuevo ciclo.