El «supersábado» lo fue ayer durante toda la jornada y, cómo no, la «mascletà» no podía ser menos. Ahí, en la plaza del Ayuntamiento lucía el cartel de que le tocaba el turno a la pirotecnia Hermanos Caballer. Y, ya se sabe, esto es garantía de espectáculo, de emoción y de intensidad de principio a fin.

Como ya se esperaba, el público, procedente de multitud de lugares, abarrotaba la plaza en este sábado previo al de la semana grande, pero donde el ambiente festivo ya es total. La «mascletà» empezó con una combinación de aéreos y terrestres entre los que destacaban los vivos colores de la Senyera. Una serie de disparos acompasados por toda la plaza servía de previo al impresionante terremoto final que cubrió el cielo de humo y de estruendo. En el balcón del ayuntamiento, de hecho, la gente intentaba protegerse de la multitud de restos que llegaban desde los cielos.

El pirotécnico José Vicente Caballer reconocía que, a pesar de su experiencia «la procesión se lleva por dentro y siempre es una tensión», pero matizaba que confía «en el trabajo que hacemos cada día y, aunque la mascletà siempre tiene un punto de azar, intentamos llevarlo todo lo más controlado posible para intentar ofrecer un espectáculo digno de la plaza del ayuntamiento». Explicaba que este es «un lugar estupendo» para hacer mascletàs y que aquí «el esfuerzo siempre vale la pena».

Si la plaza estaba llena, el balcón consistorial no lo estaba menos. Por el se dejaron ver concejales como Glèria Tello o Sandra Gómez, o el president de les Corts, Enric Morera.

La concejala de Turismo, la socialista Sandra Gómez, auguraba una «gran semana» para la hostelería. Preguntada sobre las peticiones de aumentar los días festivos en Fallas, reconocía que se está trabajando para que el año que viene haya dos festivos oficiales, que serían lunes y martes, 18 y 19.