La proliferación de dispositivos móviles en casi la totalidad de la población hace que relación entidad-cliente que había hasta hace poco esté cambiando de forma drástica.

Antes el ir al banco físicamente era lo habitual. Pero ahora, entre lo dicho antes y el que cada día tenemos menos tiempo disponible con nuestros quehaceres diarios, ha hecho que un canal como la banca online, que ya estaba en nuestro sistema financiero desde hace tiempo, despegue por completo en estos momentos.

El cliente no tiene tiempo a ir a la sucursal de toda la vida, con lo cual es esta la que tiene que ir al cliente.

Ya sea un banco tradicional de toda la vida que usa este canal como medio de estar con sus clientes o bien entidades online que carecen de sucursales, están experimentando un incremento en sus cifras de negocio. El cliente más contento porque puede ver ‘su banco’ desde cualquier punto que tenga Internet.

La entidad financiera contenta ya que puede prescindir de empleados en sucursales tradicionales ante la falta de trabajo con lo cual ahorra en costes. Este ahorro se traslada en las condiciones de los productos que se contraten de forma online que suelen ser libres de cualquier tipo de gasto o comisión.

Por eso vamos a analizar hoy el producto típico por el cual comienzan los clientes a vincularse a las entidades, como son las cuentas.

Y dentro de las cuentas online, dos son los tipos habituales de cuentas que se contratan: o bien aquellas que sirven para llevar el día a día de sus finanzas personales o bien aquellas destinadas a conseguir una rentabilidad en sus saldos teniéndolos disponibles en todo momento. Las primeras suelen ser las cuentas nómina online o las cuentas corrientes, mientras que las segundas son las denominadas cuentas remuneradas online. Las primeras casi nunca poseen remuneración y las segundas casi nunca admiten domiciliaciones.

Operativamente entre ellas hay una gran diferencia que es la de que en las primeras se admiten las domiciliaciones, por lo tanto nóminas, recibos,…, pueden pagarse a través de ellas. Mientras, en las cuentas remuneradas, casi en ninguna se admiten domiciliaciones (como ya dijimos en el párrafo anterior) ya que no dejan de ser unas cuentas de ahorro con la particularidad de que siempre están disponibles sus saldos cuando el titular solicite su dinero.

Pero en ambos casos estamos hablando de cuentas contratadas de forma online.

Lo ideal sería una cuenta que posee ambas características: que remunere y que admita domiciliaciones. Existe una por ejemplo como es la Cuenta Nómina de Bankinter, que como indica su nombre, es cuanta que admite la domiciliación de la nómina y, en consecuencia, también domiciliaciones de cargos, pero que a su vez es remunerada. Libre de comisiones de mantenimiento, ni por las tarjetas vinculadas ni por la realización de transferencias, remunera al 5% TAE el primer año y al 2% TAE durante el segundo aquellos saldos que haya en la cuenta que no superen los 5.000 euros, cifra a partir de la cual no nos podremos quedar aquí.

Es una cuenta nómina para el día a día con remuneración de una cuenta remunerada.

Parecida a esta es la Super Cuenta Remunerada de Self Bank que, sin ser cuenta nómina, si permite la domiciliación de ésta y de recibos además de tarjetas gratis asociadas, teniendo en cuenta que es una cuenta remunerada al 1,95% TAE.

Otras cuentas online interesantes pero que no ofrecen remuneración sería la Cuenta Nómina de Open que posee en el mercado Openbank . Libre de gastos de mantenimiento, admite todo tipo de operativa y además devuelve el 1% de los recibos domiciliados y cargados en la cuenta. O también es interesante la comercializada por el Banco Sabadell con la denominación de Cuenta Expansión que se puede contratar en sucursales tradicionales o bien a través de la banca online. También es de as que devuelve parte de los recibos y es una cuenta completamente gratuita.

En cuanto a las remuneradas nos encontramos con la siempre contratada y más que conocida Cuenta Naranja de ING Direct, claro ejemplo del funcionamiento de la banca online que admite la apertura de esta cuenta sin la necesidad de cambiar de banco. En estos momentos se encuentra entre las que más remuneran ya que hablamos de un 2,40% TAE los cuatro primeros meses para posteriormente bajar al 1% TAE.

Otra que nos resulta muy interesante es la Cuenta Más Open que ofrece una remuneración al titular del 1,25% TAE. La Cuenta Azul de iBanesto, la Cuenta Ahorro de bancopopular-e.com son también cuantas remuneradas que ofrecen esta rentabilidad y vemos que ambas son entidades online.

Visto lo anterior, aquellos usuarios de banca online que quieran disfrutar de ambas cosas, rentabilidad y operativa cotidiana sin límites, deberán de contratar dos cuentas, una remunerada en la cual se irá ingresando dinero de otra cuenta corriente o nómina que se habrá y en la que se admitirá todo tipo de operativa.

Un ejemplo de esto es la Cuenta Inteligente de EVO Banco. No es una cuenta, realmente son dos vinculadas. La cuenta para el día a día, sin limitación de operaciones a través de ella, posee una remuneración, pero cuando sus saldos superan los 3.000 euros de forma automática esa cantidad que se excede se traspasará (sin coste) a la cuenta remunerada. Hoy se encuentra ofreciendo un 2% TAE.

Lógicamente cada uno conoce sus circunstancias pero claro está que el tener dos cuentas online aperturadas en la misma entidad en dos formatos distintos permite una completa libertad de operativa y disfrutar además de rentabilidad sobre los saldos a la vista.

José Luis del Campo Villares, colaborador de iAhorro