El salón de plenos de Benetússer estaba el jueves abarrotado de público. La mayoría acudió para interesarse por el estado de la residencia de mayores que la Generalitat tiene en la localidad y cuya reapertura se prevé para el próximo mes de abril bajo la gestión de una empresa externa. La privatización es algo a lo que siempre se ha opuesto la Plataforma Ciudadana en defensa del centro, que el jueves se dejó oír en la sesión plenaria y cuyas críticas provocaron que la alcaldesa, la popular Laura Chulià, acabase suspendiendo de manera tajante el turno de intervenciones del público.
Minutos antes, su partido había apoyado la moción presentada de manera conjunta por la oposición, en la que se pedía que el consistorio solicitase oficialmente a la conselleria que la residencia fuera gestionada de manera pública. «Me hubiese gustado que abriese tal y como cerró, siendo de gestión pública —dijo la mandataria—, pero el centro es de la Generalitat, no nuestro, y es ella quien decide». La propuesta fue aprobada con la unanimidad de todos los ediles de la corporación.
Tras finalizar la sesión, los miembros de la Plataforma Ciudadana fueron los primeros en hablar durante el turno de intervenciones del público. Uno de ellos preguntó si la moción recién aprobada paralizaba la apertura de la residencia en las condiciones que preveía la conselleria (con una gestión privatizada) y, al contestarle el secretario municipal que no, planteó a la alcaldesa la posibilidad de que fuese el ayuntamiento, o al menos el equipo de gobierno, el que reclamase esa paralización.
La mandataria se negó en redondo. «No entiendo nada. Siempre habéis querido que la residencia se abriese y, cuando se consigue, pedís que se paralice porque no es como vosotros exigís», les respondió. «No vamos a pedir que se suspenda la apertura —agregó Chulià— porque, aunque creo que habría sido mejor que abriese bajo un modelo de gestión pública, la prefiero abierta antes que cerrada. Y, eso, creo que es algo que comparten muchos de los vecinos de Benetússer», sentenció.
La siguiente intervención del público fue en la misma línea y la siguiente también hasta que la alcaldesa consideró que, «en vez de hacer preguntas», se estaban vertiendo «opiniones en manera de debate» y decidió dar por suspendida la sesión. Su actidud levantó las propuestas del público, que se quejó airadamente e incluso llegó a abuchear a Chulià.
La residencia de mayores, de ámbito comarcal, contará con 28 plazas subvencionadas, cinco de ellas para dependientes. La gestión del centro se encuentra aún en fase de licitación. Las firmas interesadas deberán pagar 3,8 millones por encargarse de ella durante los próximos cuatro años.
