El equipo de gobierno de Silla, dirigido por el popular Serafín Simeón, vuelve a llevar al pleno municipal la propuesta de adjudicación del contrato del agua después de que la oposición la haya rechazado en varias ocasiones (el PP está en minoría) y le haya reclamado que deje el asunto para el próximo mandato.
Sin embargo, Simeón no ceja en su empeño porque «hay que dar cumplimiento a la sentencia que ordena volver a licitar el servicio, cuya ejecución ya nos ha reclamado el juzgado». La resolución judicial, hecha pública hace unos meses, anula la anterior adjudicación y manda realizar de nuevo el procedimiento. Esta misma semana, el consistorio ha recibido el requerimiento que le insta a hacer efectivo el fallo en un plazo máximo de dos meses. En concreto, el tribunal reclama al ayuntamiento que le especifique en los próximos días «el órgano responsable del cumplimiento» de la sentencia y que, «en el plazo de dos meses, se lleve a puro y debido efecto».
La exigencia judicial no hace sino reafirmar la postura del alcalde, que siempre se ha mostrado favorable a adjudicar el contrato del agua «a la empresa que propuso la Mesa de Contratación», esto es, a la firma que en 2009 resultó ganadora aunque luego el contrato fue para otra. «El fallo del tribunal hay que cumplirlo antes o después —insiste— y, si hacerlo supone beneficios económicos para el ayuntamiento, no sé por qué hay que esperar más».
En el último pleno municipal, el PP no consiguió sacar adelante la propuesta pese a que España 2000 y Compromís se abstuvieron, ya que no consiguió la mayoría absoluta que requiere el asunto.
