Apelando al cambio, a la transparencia y a una nueva forma de hacer las cosas, los líderes de Compromís asumieron ayer en dos ciudades emblemáticas, Manises y Paiporta, las alcaldías, gracias a los pactos de izquierdas que en los días anteriores se negociaron y anunciaron. Por primera vez en la historia de estas ciudades la vara de mando no está en manos ni de socialistas ni de populares.

En Manises, el líder de APM-Compromís, Jesús Borrás, asumió la vara de mando en un repleto Auditorio Germanías con sus cinco votos, a los que sumó los cuatro del PSPV, los tres de Sí Se Puede y los dos de EU. Los cuatro partidos han formado un gobierno multicolor atendiendo a la voluntad de las urnas, según expresó Borrás, que dijo que era «un orgullo» ser el alcalde de su pueblo. El PP liderado por el exalcalde Francisco Izquierdo queda en la oposición con seis ediles. Ciudadanos logró un regidor.

Borrás proclamó en su discurso que «sus políticas se centrarán en ayudar a los vecinos en riesgo de exclusión porque no pueden comer y pierden sus viviendas», además de eliminar el rodillo de la política porque «se han acabado las mayorías absolutas». «Queremos sacar a Manises del mapa de la corrupción», añadió.

En Paiporta, la ciudad fue feudo del PSPV desde 1979 y hasta hace ocho años, en la figura de Bartomeu Bas, que fue sustituido por el popular Vicente Ibor en 2007. Y ayer, una licenciada en Ciencias Exactas que, sobre todo en los últimos cuatro años, se había convertido en el principal azote del gobierno desde la oposición, asumió la vara de mando con los votos de los socialistas, liderados por Vicent Ciscar, y de Pod-EU, cuyo portavoz es Alberto Torralba.