El Ayuntamiento de Rafelbunyol decidió ayer cerrar de forma inmediata las piscinas municipales de verano (la de adultos y la infantil) tras descubrir que el anterior gobierno del PP la puso en marcha en 2013 pese a carecer de la licencia de actividad que tenía que otorgar la Conselleria de Industria. El pasado año, las piscinas descubiertas registraron unos 11.000 usuarios durante los tres meses (del 1 de junio hasta el 30 de agosto) en los que permanecieron abiertas. El gobierno local aseguró ayer que espera haber solucionado los trámites legales para poder reabrir las instalaciones la próxima semana.
Según se desprende de los informes técnicos, no es que la conselleria no haya otorgado esta licencia, sino que el consistorio ni siquiera la tramitó. Y no lo hizo porque la instalación eléctrica del complejo deportivo carece de proyecto, y por lo tanto no existe un informe favorable del organismo de control autorizado (OCA) para las instalaciones eléctricas.
Así pues, el ayuntamiento no podía aportar a la conselleria el proyecto eléctrico, el boletín de la instalación y el informe de la OCA imprescindibles para llevar a cabo la tramitación de la correspondiente declaración responsable de actividad recreativa para piscinas municipales. De esta forma, las piscinas municipales «descubiertas» de Rafelbunyol han estado funcionando durante los veranos de 2013 y 2014 y parte del de 2015 de forma ilegal.
Pero no sólo eso. Según informó ayer el alcalde de la localidad, Fran López (PSPV) desde su inauguración esta actividad carecía también del obligatorio seguro sanitario, algo que también ha sido descubierto por el nuevo equipo de gobierno PSPV-IdRA y que se había solucionado de forma urgente. «Sí tenía seguro de responsabilidad porque es el del ayuntamiento», añadió ayer el alcalde. Aún así, y según fuentes municipales, aunque hay un seguro contratado, el hecho de no cumplir la legalidad eximiría a éste de toda responsabilidad.
Las piscinas descubiertas (o de verano) de adultos e infantil de Rafelbunyol se abrieron al público en 2013 aprovechando los vasos de las piscinas del antiguo polideportivo. Al año siguiente el ayuntamiento construyó unos nuevos vestuarios y dos cuartos de instalaciones, además del pavimento de las zonas comunes. Según indican los técnicos, para su apertura en 2013 se debía haber legalizado la instalación eléctrica de las piscinas al tener más de 5 kilowatios de consumo de potencia, lo que obliga a realizar un proyecto eléctrico que sirviera para obtener el preceptivo boletín del instalador. Una vez obtenido el boletín, un OCA tendría que haber realizado la inspección obligatoria de las instalaciones eléctricas y, con el visto bueno, requerir a Industria la legalización de las instalaciones.
