Siguiendo el ejemplo del gobierno local de Paiporta, tanto en la decisión como el los argumentos, Compromís de Torrent ha presentado una moción en la que propone que «ninguna autoridad municipal» participe en actos religiosos en representación de la corporación local, sin perjuicio de que acudan a título personal.

La moción pide también que ningún funcionario municipal participe, en calidad de su cargo, en actos de estricto culto religioso, y que se determine que los actos públicos oficiales del ayuntamiento serán civiles.

Para argumentar la petición, la coalición esgrime el artículo 16 de la Constitución, que se refiere a la libertad religiosa y a la aconfesionalidad del Estado, además de considerar que el laicismo es la mejor forma de garantizar que se mantiene la «convivencia pacífica» que ya existe en la sociedad, entre las diferentes religiones, el ateísmo y el agnosticismo.

Al conocer la moción, el PP de Torrent ha criticado que, de aprobarse, se acabará con la participación de la corporación en tradiciones arraigadas como el Encuentro Glorioso, l'Entrà de la Flor —«que se celebra en Torrent más de 400 años», matizan—, la Ofrenda fallera, los actos rocieros o la Fira de Sant Blai.

La portavoz popular Amparo Folgado afirma que su grupo «defenderá la libertad individual» de los ediles de participar en los actos que consideren «igual que Compromís elige el libertad acudir a actos culturales procatalanistas», además de manifestar que la corporación acude a actos «de todas las confesiones». El PP se pregunta si la moción afectaría a la recepción del consistorio a los cientos de personas que participan en la Aurora, el día 8 de diciembre.

«La corporación está para resolver los problemas de los torrentinos, no para crear polémicas y prohibiciones sin sentido», dicen.