La Conselleria de Educación ha comunicado al colegio González Gallarza de Alaquàs que finalmente concederá la habilitación de una tercera aula de primero de Primaria para evitar la masificación que se ha producido este año, como ayer denunciaba la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA), a través de Levante-EMV.

Al haber eliminado el anterior Consell una unidad de infantil hace tres años —había tres y dejó una en castellano y una en valenciano—, los alumnos de ese curso en la lengua autóctona son ahora 29 en primero de Primaria, ya que al grupo inicial de 25 su han sumado cuatro repetidores. Además, varios alumnos que querían esta línea, tuvieron que pasar voluntariamente a castellano para no exceder de la ratio máxima.

Este «embudo», en palabras de la AMPA, se iba a arrastrar año tras año en el colegio, a no ser que se habilitara un aula más, que inicialmente Educación denegó. Por ello, la AMPA pedía el apoyo de FAPA y de Escola Valenciana para lograr esta clase, además de denunciar el agravio con otros colegios que han recuperado unidades suprimidas. Los padres pusieron como ejemplo al Ciutat de Cremona, en el mismo pueblo, o al Cervantes de Xirivella.

De forma paralela, las madres y padres directamente afectados por estar sus hijos en ese curso de 29 alumnos, habían emprendido una recogida de firmas que avalara su petición, al igual que se habían pronunciado el Consell Escolar y el ayuntamiento.

Pero ayer Educación comunicó al centro que reconsideraba su postura y que habilitará el aula de primero de primaria. Estos padres han agradecido la decisión porque consideran que sus hijos estudiarán en mejores condiciones y porque podrán educarse en valenciano aquellos niños que habían tenido que renunciar.