El alcalde de Mislata, Carlos Fernández Bielsa, se reunió ayer con la nueva comisionada de la Agencia Valenciana de Salud para el departamento de Manises, Mercedes Pons Esteve, en las instalaciones del antiguo Hospital Militar. El mandatario acudió a reclamarse «gestos» que demuestren la voluntad de cumplir los compromisos que adquirió la Conselleria de Sanidad en 2009 y que el anterior gobierno del Consell vulneró.

La reunión, «cordial» y «productiva», según fuentes municipales de Mislata, sirvió para analizar el problema de la sanidad pública en Mislata «enquistado desde el año 2009». Bielsa recordó a Pons que la Conselleria de Sanitat se comprometió por escrito con el ayuntamiento y con todas las asociaciones vecinales a dotar el centro de Mislata con una serie de servicios asistenciales y convertirlo en su hospital de referencia.

Y aquella promesa, no sólo no se ha cumplido sino que en seis años «se han ido desmantelando algunos de los pocos servicios que funcionaban en el Hospital Militar, hasta el punto de crear graves problemas de asistencia sanitaria, especialmente en el área de urgencias».

El alcalde explicó a la Comisionada los antecedentes y le transmitió que la ciudadanía de Mislata «está harta de años de mentiras del Partido Popular y está harta de representar un tercio de las cartillas sanitarias del área de Manises y ser el municipio con peores servicios». Dado que el problema no tiene una solución fácil, Bielsa le pidió «gestos inmediatos» que demuestren «su voluntad y la de la Conselleria de cumplir con los compromisos firmados» y que haga cumplir al gestor privado del área de Manises que «cumpla sus obligaciones». Al encuentro también asistió la concejala de Sanidad de Mislata, Maika Tarín.

Fuentes municipales indican que la comisionada reconoció que el centro presenta «importantes carencias en medios técnicos y humanos» y se comprometió a «ir solucionando los problemas más urgentes, entre ellos las Urgencias, ya que sólo hay un médico para 50.000 vecinos.