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El auge del cultivo de la chufa

La superficie en la comarca dedicada al tubérculo crece un 11,74 % respecto al pasado año El Consejo Regulador vaticina una producción de 7,5 millones de kilos con una subida de diez céntimos en el precio

El auge del cultivo de la chufa r. b.

Un total de 18 municipios de la comarca de l'Horta Nord, más Valencia ciudad, dedican parte de sus terrenos al cultivo de la chufa. Las condiciones climáticas y de suelo en la zona la convierten en la única parte de Europa en la que se produce este singular tubérculo. En el ecuador de la campaña de recolección, las perspectivas que augura el Consejo Regulador son muy positivas, marcadas por el aumento de la demanda tanto nacional como internacional de la chufa que se ha puesto de moda como superalimento.

En esta campaña, la superficie destinada a la chufa ha alcanzado las 5.250 hanegadas, lo que supone un incremento del 11,74% respecto al pasado ejercicio. La cifra confirma la tendencia alcista que ya se detectó en años anteriores. En cuanto a la producción, rondará los 7,5 millones de kilos de chufa tierna, una cantidad muy similar a la de la temporada anterior. Su alta demanda ha elevado el precio del kilo de 60 a 70 céntimos.

Aunque los primeros controles sobre las partidas recolectadas indican su excelente calidad y buen tamaño, la temida mancha de la chufa es uno de los problemas con los que se encuentran los agricultores. «Esta problemática sobre el cultivo no afecta a su calidad intrínseca pero a los artesanos les gusta la chufas que no tienen manchas al presentar mejor calidad visual con lo cual esa producción, en principio, no contaría al ser desechada», explica Francesc Espinosa, presidente del Consejo Regulador.

Perjuicio por la chufa manchada

Los comerciantes, que se encargan del secado de la chufa al carecer el agricultor de los medios y la infraestructura necesaria, tratan de vender el tubérculo con mancha a horchaterías de menor tamaño que sí lo aceptan para elaborar horchata. En este proceso, el gran perjudicado es el labrador que no ve un euro por el producto defectuoso porque el comerciante no se lo compra, aunque trate de colocarlo.

Desde el Consejo Regulador explicaron que a través de Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA) están tratando de averiguar qué provoca esa mancha en la chufa y cómo combatirla.

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