El Partido Popular de Torrent ha presentado ante el Síndic de Greuges un escrito en el que pide que emita un dictamen sobre la legalidad del proceso de licitación realizado por el equipo de gobierno socialista para renovar los uniformes de la Policía Local por 205.000 euros. Los populares sostienen que el ´caso uniformes´ está «plagado de sombras con multitud de irregularidades administrativas».

Además, el edil popular Nacho Carratalá ha anunciado que han solicitado al Ayuntamiento un nuevo pliego que «se ajuste a la legalidad» y un procedimiento de contratación de los uniformes policiales «limpio y transparente, que permita que todas las empresas se puedan presentar en igualdad de condiciones. A día de hoy seguimos sin respuesta».

La renovación de los uniformes de la Policía Local de Torrent ha sido denunciado por el PP casi desde el primer día. Durante la mesa de contratación, los populares lograron frenar el proceso solicitando un nuevo informe de expertos sobre las diferencias de calidad de las dos aspirantes pero en una segunda reunión, la mesa aprobó adjudicar por 205.000 euros la uniformidad «a la empresa más cara». El PP detalló en su día que existían diferencias de hasta un 100% en las prendas de las dos ofertantes y que la firma que al final logró el contrato vende los mismos productos en otros municipios valencianos un 30% más baratos. Para el concejal popular la empresa ganadora «redondea los precios a la baja para salvar el precio máximo de licitación».

Además, los populares también apuntaron al color de las prendas en la licitación. Carratalá expuso que el pliego de condiciones permitía que el anorak de los agentes fuera azul celeste cuando «el decreto decreto 114/2005 de la Generalitat deja muy claro que sólo se permite el azul celeste para las camisas de manga larga y corta». Las conclusiones de los populares era que el consistorio pretendía beneficiar a una de las aspirantes.