Que hubiera determinadas plazas de un aparcamiento municipal que no suscitarán el interés de los ciudadanos de Sedaví para alquilarlas dos años después de su apertura, hizo sospechar a uno de los técnicos del consistorio que, armado de un metro, papel y lápiz, descubrió con sorpresa que los espacios para estacionar los vehículos eran más pequeños de lo que marca el Plan General de Ordenación Urbana.
La historia se remonta al año 2010. El consistorio gobernado entonces por el Partido Popular adjudicó por poco más de dos millones de euros la construcción de un aparcamiento municipal en un solar ubicado en la calle Valencia. La ejecución final de la obra, concluida en 2013, ascendió a unos 2,2 millones, más IVA. A esto hay que sumar los 279.000 euros (también sin IVA) que abonaron las arcas locales por los honorarios de la redacción del proyecto, arquitectos y demás. Cabe apuntar que el presupuesto inicial para este apartado era de 215.751 euros, que acabó incrementándose por la ejecución de excesos en la medición de unidades de obra. En total, el garaje costó más de 2,85 millones de euros de los que la Generalitat financió dos a través del Plan Confianza que impulsó Francisco Camps y el resto corrió por cuenta del Ayuntamiento de Sedaví.
El aparcamiento consta de 180 plazas dividido en dos plantas de 87 y 93, respectivamente. Los ciudadanos tienen la posibilidad de acceder a un alquiler mensual por unos 40 euros, aunque hay un determinado número de espacios de un tamaño superior a un precio de 50 euros para aparcar un vehículo y una motocicleta. Desde su apertura hace dos años el goteo de alquileres ha sido constante y en la actualidad el primer sótano se encuentra al 95% de ocupación, mientras que el segundo está por el momento vacío.
A finales del mes de octubre del pasado año, un técnico de Urbanismo, alertado por la falta de interés por algunas plazas, comprobó de primera mano a qué se debía. Treinta de los espacios para aparcar, 15 por planta, no se ajustan a las medidas mínimas que marca la ley. Según consta en el Plan General de Ordenación Urbana de 1988, y modificado puntualmente en 2008, las dimensiones mínimas de un aparcamiento deben de ser de 2,2 metros de ancho por 4,5 de largo, no admitiéndose medidas inferiores y libres de obstáculos.
El obstáculo de los pilares de carga
Por contra, las plazas de menor tamaño del garaje municipal de Sedaví están encuadradas en conjuntos de tres espacios entre los pilares de carga del edificio, que son los que realmente reducen el área de estacionamiento. Las medidas entre pilares son 6,51 metros o 6,49 metros (a dividir entre tres vehículos) con lo que hay sitios para estacionar que no alcanzan los 2,20 metros legales.
El informe del técnico municipal detallando las deficiencias pasó por la Junta de Gobierno del 20 de noviembre, en la que se aprobó un plan alternativo: reconvertir las 30 plazas en 20 para turismos y 10 para motos.
Además, en la junta se dio luz verde a que el equipo de gobierno, formado por PSOE, Compromís y Sí se Puede, estudie los mecanismos pertinentes para iniciar acciones con el fin de depurar responsabilidades por el defecto en la obra. El consistorio pretende determinar si el error en las medidas fue del equipo que redactó el proyecto o de la empresa que ejecutó el aparcamiento.
