Durante el acto que pone el colofón al ejercicio fallero como es la «cremà», hay quien no se emociona al ver arder el monumento o contempla de espectador como el fuego devora la falla. Sin embargo son igual de protagonistas en la última noche de las fiestas josefinas. Son los bomberos, que esta noche se encargarán de controlar y prevenir que todo salga a la perfección para el disfrute de falleros y ciudadanos.
El Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia ha preparado un gran despliegue que contará con 138 vehículos y 440 efectivos, entre los cuales se cuenta con personal del Consorcio, unidades de Brigadas de Emergencia de las tres provincias, unidades de las Brigadas de la Diputación de Valencia y unidades del Sepei de Albacete.
Pero el plan comienza a desarrollarse días antes. Según explica el jefe de Prevención del Consorcio Provincial, Jorge Sánchez, son los propios ayuntamientos los que han rellenado, a través de la página web del Consorcio, las fichas de evaluación de riesgo de los monumentos. Estos datos permitirán crear una base que servirá para agilizar el proceso en los años próximos.
Para determinar si un equipo de bomberos cubre o no a la «cremà» de una comisión depende del nivel de riesgo „muy alto, alto, medio, bajo o muy bajo„ que presente. Para determinarlo se analizan unos parámetros como altura de la falla, radio aproximado de la base y distancia de la fachada más próxima con materiales combustibles. Son los inspectores, normalmente los jefes de parques, los que deciden a qué fallas realizan la prevención. En la comarca, los bomberos acudirán a 104 de los 254 monumentos grandes plantados en los municipios de l'Horta para ejecutar las labores de control, tras recibir 239 solicitudes. En este sentido, a aquellas fallas que no vayan los bomberos son miembros de Protección Civil de los municipios o los propios falleros los que vigilarán la «cremà». El Consorcio Provincial lleva varios años formando a integrantes de comisiones o de Protección Civil en la labores de actuación de nivel bajo.
En cuanto a los horarios, depende de cada municipio. En unos lo marcan los premios mientras que en otros se establece un sistema rotatorio para que cada año una falla se queme en horario distinto, sin contar los galardones. Así los bomberos tienen establecida la hora de «cremà» y no de la prepararla, que es cuestión de los falleros con bastante antelación.
Material de apoyo de brigadas
Los parques reciben para una cita como la de hoy material de apoyo procedente de brigadas forestales de la Generalitat o de la Diputación que revisan a partir de la tarde noche. Posteriormente los equipos distribuidos salen en ruta para cubrir sus cremàs, unas cuatro por cada grupo para evitar que se alargue mucho la noche.
