Los cuatro grupos de la oposición en el Ayuntamiento de Torrent se han unido para reclamarle al gobierno socialista que mantenga el adoquinado histórico protegido de la calle Santa Anna y adyacentes, en lugar de ejecutar la obra prevista que supondrá su cobertura con asfalto o con piezas de hormigón prefabricado para hacer vías de plataforma única. Las formaciones han presentado una moción conjunta para que se debata en el pleno, según desveló ayer Guanyant Torrent.

Esta formación junto al Partido Popular, Compromís y Ciudadanos recuerdan en la moción que el Plan Especial de Protección y Reforma Interior (Pepri) del centro histórico, aprobado provisionalmente, protege como Bien de Relevancia Local ese empedrado. Por tanto, consideran que ese texto es el que ha de aplicarse mientras no haya un documento de planeamiento definitivo y cualquier propuesta que lo contradiga debería haberse presentado en la fase de alegaciones para que los técnicos la informaran y el pleno se pronunciara.

De ahí que la moción pida que se respete el empedrado —sin taparlo y sustituirlo o levantarlo— y se actúe en esas calles según la ficha que marca el catálogo redactando otro proyecto. Además, piden que el nuevo plan atienda las demandas vecinales de mayor accesibilidad en las aceras —actualmente son estrechas y muy altas—, y que se eviten materiales como asfalto o hormigón prefabricado, porque contribuyen a aumentar las humedades en las viviendas.

Paralizado por Cultura

Las obras en la calle Santa Anna y su entorno se iniciaron en enero y fueron paralizadas a las pocas horas por la inspección de Patrimonio de la Conselleria de Cultura. Posteriormente el consistorio presentó sus alegaciones y, al final los técnicos de Patrimonio admitieron el proyecto, aunque la obra aún no se ha retomado. Al conocer la autorización de la conselleria, la asociación Casino Torrent propuso a los grupos municipales que actuaran y, de ahí salió hace semanas la moción conjunta. Aunque inicialmente se ofreció al PSOE sumarse, este grupo aún no ha decidido su postura. No obstante, el gobierno local organizó una reunión de todos los grupos con los técnicos responsables de Urbanismo y del plan de la que, aseguran, no quedaron muy convencidos. «El argumento era que restaurar el patrimonio multiplicaba por tres el coste y creemos que hay otras soluciones que pueden preservarlo y hacer las aceras más accesibles», indican.

También el Casino les ha proporcionado un documento con diferentes alternativas técnicas, elaborado tras consultar a expertos en Patrimonio.