El sindicato CSI·F denuncia las instalaciones pequeñas, obsoletas y sin apenas mantenimiento del partido judicial de Torrent. Esta circunstancia contrasta con la implantación de la nueva oficina judicial, que prevé, a partir de este mismo año, salas compartidas por más de 15 empleados públicos. La central sindical señala que los actuales juzgados están diseminados y recuerda el proyecto paralizado de ciudad de la justicia.

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI·F) explica que el partido judicial de Torrent se encuentra entre los escogidos para implantar al completo la nueva oficina judicial. Este hecho conlleva la creación de la estructura completa del Servicio Común General, con entre 15 y 20 empleados, la de Ejecución Civil del Partido Judicial, con otros tantos, y órganos con amplia plantilla como Ordenación del Procedimiento y las unidades procesales de apoyo directo.

CSI·F señala que esos servicios, que estarán operativos progresivamente entre finales del presente 2016 y 2018, contemplan prestaciones de envergadura con decenas de empleados públicos en cada una de ellas. Esta circunstancia resulta imposible con la actual estructura física del partido judicial, repleto de pequeñas salas en las que apenas caben cuatro trabajadores. Además, los juzgados de Primera Instancia 4, 5 y 6, el de Violencia sobre la Mujer o el Penal están diseminados, en diferentes bajos comerciales.

El sindicato afirma que "se ha producido un abandono y una dejadez en los últimos años a la espera de una ciudad de la justicia que tenía que estar construida desde hace ya un lustro. En las actuales instalaciones resulta inviable implantar la nueva oficina judicial". CSI·F urge a Conselleria a retomar el proyecto de Ciudad de la Justicia de Torrent o, en su defecto, a habilitar una instalaciones en condiciones para poder prestar un servicio adecuado en este importante partido judicial.

La central sindical ha denunciado en los últimos años diversos problemas como boquetes en el techo del juzgado número dos, problemas de refrigeración, falta de insonorización, de mamparas en el registro y en el Decanato, estanterías de archivos con los rodillos giratorios estropeados, fuertes corrientes de aire o azulejos que se desprenden de las paredes de cuarto de baño por carencia de mantenimiento.