Un año después de su puesta en marcha y tras ingresar los municipios 1,7 millones de euros, los fotorrojos pueden tener los días contados. El presidente de la Mancomunitat de l'Horta Sud, Carlos Fernández Bielsa, ha anunciado que paralizará el contrato de los fotorrojos, el sistema de cámaras que sanciona a los conductores que se saltan el semáforo en rojo, hasta que exista uniformidad de criterios judiciales. La medida viene motivada por el escrito remitido por el alcalde de Catarroja Jesús Monzó en el que instaba a suspender la concesión al apreciar disparidad de criterios judiciales en ocho sentencias: 6 a favor de los recursos que presentaron los conductores sancionados y dos que calificaban el dispositivo sancionador de legal.

Bielsa ha convocado para el próximo martes a la Junta de Gobierno de la institución para abordar la suspensión del contrato firmado durante la anterior legislatura del PP y al que se acogieron Beniparrell, Catarroja, Massanassa, Picanya y Sedaví. Para ello, el presidente ha pedido a la secretaria de la institución que elabore un informe jurídico sobre las consecuencias que pudiera ocasionar para los cinco consistorios la suspensión de la concesión. Si el informe es favorable, ordenará la paralización del contrato y presentará un recurso de casación al Tribunal Supremo para que determine cuál de las dos sentencias es la correcta.

El presidente de la Mancomunitat de l'Horta Sud siempre se ha mostrado contrario a este sistema de multas y recuerda que son los municipios firmantes quienes asumieron la responsabilidad de instalar fotorrojos y que él siempre ha defendido que la Mancomunitat «no está para poner multas, está para ayudar a la gente, especialmente a las personas que peor lo están pasando».

Más de 1,7 millones en un año

Cabe recordar que los cinco pueblos, tal como adelantó Levante-EMV el pasado viernes, han registrado en un año 34.703 sanciones lo que se traduce en 6,9 millones de euros, de los que sólo se han ingresado 1,7 millones. La concesionaria se lleva un 20% de lo recaudado.