El Partido Popular de Torrent aseguró ayer que el ayuntamiento «siempre ha facilitado a todos los partidos políticos en campaña electoral, el material necesario para realización de sus actos, ahora, antes y cuando gobernaba Jesús Ros en su primera etapa de alcalde» y «no solo se paga por parte del ayuntamiento a los partidos políticos, sino que también a las asociaciones y entidades festivas, religiosas y colegios el consistorio facilita mesas, sillas, escenarios, y en 2011 también los puntos de luz».

Como publicó este diario, entre las facturas prescritas que presentó la empresa Alvir figura el acto de cierre de campaña de los populares en 2011 a los pies de la Torre que incluía mil sillas y 180 mesas, pero también un escenario con trasera y vestido con moqueta azul, un grupo electrógeno y un equipo de sonido. El albarán ascendía a 2.057 euros.

Amparo Folgado lamenta que «se focalice en el PP el gasto de este material para actos de campaña cuando también se ha entregado al PSOE, a Compromís y al resto de formaciones políticas que lo han solicitado». En este sentido, apunta que en el mitin de cierre de campaña de 2011 del PSOE, el ayuntamiento facilitó a Andrés Campos, que era el candidato, los materiales necesarios para la realización de su acto.

Por alusiones Campos reconoció —como también publico este diario— que el consistorio les facilitó 40 mesas y 300 sillas y que Alvir facturó por 375 euros pero «el escenario, la megafonía y todo lo demás era por cuenta del partido, no de las arcas públicas».

«Esconder el gasto real»

Por su parte, desde Compromís también negaron que el ayuntamiento pagará todo lo necesario para un acto de campaña. «Mesas y sillas sí pero escenarios con moqueta o grupos electrógenos y equipos de sonido no los pagaba», indicó el portavoz de la formación Pau Alabajos. Para el regidor, que cuatro años después aparezcan facturas de fiestas—verbenas de moros y cristianos, por ejemplo—«denota que el PP quería esconder el gasto real de fiestas, y que en realidad gastaba mucho más de lo que tenía oficialmente presupuestado». Además, Alabajos , revela que el informe de Intervención refleja que «este tipo de contrataciones con la mercantil Alvir requerían previamente de un concurso público de ofertas, velando para que cualquier empresa del sector pudiera optar en concurrencia competitiva con las mismos derechos y obligaciones».