Después de un año y un mes desde que asumió la vara de mando en Sedaví, el socialista José Francisco Cabanes ha dejado el cargo para cumplir el acuerdo tripartito de investidura que suscribió con Compromís y la marca blanca de Podemos. Un pacto alcanzado minutos antes del pleno y por el que el valencianista Ferran Bauxauli tomará el relevo el próximo viernes. Anoche en un pleno extraordinario se hizo efectiva la renuncia.

Cabanes afirma que deja el cargo «satisfecho» por haber liderado un gobierno «de progreso» que, en su opinión, ha impulsado las políticas sociales, ha saneado las cuentas y ha profundizado en la transparencia y la participación. Respecto a trabajar con dos socios más, opina que es «igual de complicado que hacerlo con mayoría absoluta, si quieres gobernar democráticamente y escuchar a la gente». «Nos llamamos partidos pero para trabajar por un pueblo, no hay que ser un partido sino un entero. Ir todos unidos por el interés general», dice.

Por primera vez, el consistorio ha impulsado presupuestos participativos para una partida de 80.000 euros, cuyas inversiones se ejecutarán en los próximos días y además se ha liquidado una sentencia de más de un millón de euros que «era una lacra» correspondiente a una expropiación de hace 20 años. El ya exalcalde cifra la rebaja de la deuda que han logrado en medio millón de euros conseguida «mientras aumentaban los avances sociales como la 'tarjeta monedero'» que permite a las familias sin recursos comprar productos en los comercios locales «con toda la dignidad y sin el estigma de hacer colas».

Otro de los logros que Cabanes destaca es haber desbloqueado el conflicto heredado de la piscina cubierta, que reabrirá sus puertas el 1 de octubre «a unos precios que la gente pueda pagar» porque «allí se hace deporte de base y por salud». También destaca el decreto de alcaldía por el que se ha incrementado la transparencia y la participación en las adjudicaciones públicas, por medio de subastas abiertas a la baja, «con las que hemos logrado una rebaja media del 25% en el coste».

Desde la llegada del tripartito, «ha sido posible también» albergar la Trobada d'Escoles en Valencià, «la primera a la que asiste un presidente del Consell», que supuso «un importante impacto económico para el comercio, especialmente para los bares, que duplicaron plantilla y servicios». Pequeñas reformas en instalaciones deportivas, arreglos de calles «que no se tocaban desde los años 70» o la independencia de la Junta Local Fallera del poder político son otras de las cosas de las que Cabanes se siente «orgulloso».

Con becarios como secretarios

En el terreno organizativo, José Francisco Cabanes remarca que no ha tenido ni asesores, ni cargos de confianza ni secretaria, «simplemente una funcionaria llevaba la agenda pero las tareas las han realizado dos estudiantes en prácticas de un colegio concertado de Sedaví, que han aprendido gestión, protocolo y relaciones institucionales en este tiempo. Y como aquí no hay nada que ocultar, no ha habido problema en que esos asuntos los llevaran personas externas. El pleno aprobó para él un sueldo de 1.500 euros netos mensuales y «no he pasado ni un solo gasto».

Respecto a las cosas que nunca imaginaba que haría como alcalde, narra que tuvo que «sacar a una persona dependiente de la casa donde vivía porque lo tenían en muy malas condiciones» o llevar en plena noche a una camada de gatos rescatados en un contenedor «a la protectora APAX de Xirivella, a la que quiero agradecer que los acogieran».