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Sedaví

Baixauli: «Quiero lograr la EMT, un carril bici a Valencia y un apeadero de Renfe»

El nuevo alcalde de Sedaví apuesta por la movilidad y la participación en el estreno de su mandato

Baixauli: «Quiero lograr la EMT, un carril bici a Valencia y un apeadero de Renfe»

Ferran Baixauli Chornet (Sedaví, 1963) es el nuevo alcalde de Sedaví en cumplimiento del pacto alcanzado hace un año entre Compromís, PSPV y Sí se Puede. Releva al socialista José Francisco Cabanes y le esperan tres años de mandato. Este graduado social, licenciado en Ciencias del Trabajo y graduado en Derecho trabaja en Adif desde hace 35 años. Desde joven mostró predilección por la política„estuvo en la manifestación del 9 de octubre de 1978„aunque de manera más activa se adentró en 2007 como segundo de la lista del Bloc en Sedaví y en 2011 fue cabeza de candidatura. Ahora toma la vara de mando pero «en absoluto cumplo un sueño», afirma.

En el último año ha esperado desde la barrera la hora de tomar la alternativa. «He estado trabajando en mi área de Movilidad, Transporte y Medio Ambiente y he ido aprendiendo de otras áreas». Su idea es «mantener» el equipo de gobierno actual «excepto si alguien me pide que quiere cambiar o pensamos que hay que hacer algún ajuste».

En cuanto a sus objetivos, Baixauli califica de «vital» la movilidad, cuyas competencias mantendrá. «En Sedaví seguimos teniendo el mismo transporte que hace 40 años. Hay que lograr un acuerdo con la EMT aprovechando la nueva línea que entra en Forn de Alcedo para que nuestros ciudadanos puedan ir a los hospitales y se hace falta pagar, se paga una cantidad razonable», aboga el nuevo alcalde. También aspira a que Renfe construya un apeadero a la altura de La Torre, propuesta que ya presentaron en su día. Pero el objetivo de Baixauli no se queda ahí. «Ahora que está en proyecto del anillo verde, no puede ser que los ciudadanos de Sedaví no puedan ir a la playa que está a 5 kilómetros ni a Valencia en bicicleta sin jugarse la piel. Hay que construir un carril que una el corredor sur, que llega de Catarroja, y entrar en Valencia por San Vicente».

El munícipe es un defensor de la participación. «Me duele mucho ir a actos y que haya sillas vacías. Eso es muy grave. Es un error del que lo convoca, de la administración que lo tutela, pero también de la sociedad que no se puede quedar en casa viendo la tele o en centros comerciales. Para eso hay que hacer una política cultural potente», incide, para recordar los presupuestos participativos impulsados este año y que Compromís promovió en su día que se publicitara la celebración de plenos «en cuantos más sitios mejor» y que se «grabaran en vídeo».

A su vez, destaca la idea de poner en marcha huertos urbanos. «Los terrenos disponibles son de carácter privado y aunque están interesados en cederlos, al ser privados no podemos recibir subvenciones y debería sufragarlo el ayuntamiento pero trataremos de buscar el dinero para sacarlo adelante», anuncia.

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