Hace tres años que Reciclamás funciona en el polígono industrial de Alboraia y es la primera vez que sufre un incidente tan grave como incendio que ayer afectó a una de sus naves y arrasó dos empresas vecinas. Pero no es la primera vez que una planta de tratamiento y clasificación de residuos arde en esta zona industrial con decenas de empresas de tamaño medio.
El pasado dos de mayo una firma dedicada al reciclaje de papel y colchones, situada en el número 40 de la calle dels Calderers, quedó parcialmente destruida por el tercer incendio que sufría en los últimos cuatro años. Aquel fuego se inició en torno a las 17.15 horas en dos contenedores que se encontraban en un descampado de la nave industrial y que contenían material sobrante de colchones y una prensa con aceite, cuyo material inflamable, sumados a la facilidad de combustión de los residuos de la empresa, pudo facilitar la combustión.
Como ocurrió ayer, aunque no hubo que lamentar víctimas, los daños materiales fueron importantes y el fuego obligó a cortar el tráfico dentro del polígono y provocó una gran nube de humo negro que se extendió sobre varios kilómetros a la redonda y fue visible desde diferentes municipios cercanos. Eso sí, las llamas no se propagaron a los inmuebles vecinos, aunque sí hubo que desalojar a numerosos trabajadores de la zona.
También en los otros incendios que sufrió esta empresa de reciclaje hubo que desalojar las empresas limítrofes y el ayuntamiento anunció la realización de un informe sobre el impacto de estos incendios en las naves colindantes.
