Unos obreros que estaban realizando la rehabilitación de una casa antigua en pleno centro de Almàssera hallaron ayer unos misteriosos

huesos humanos que permanecían ocultos desde hacía décadas en un falso techo. Los restos óseos se encontraban en una cesta de mimbre

junto a una inscripción en un pilar de carga en el que podía leerse el nombre de una mujer y una fecha, que se remonta a 1853, a modo de esquela.La Guardia Civil investiga ahora si realmente los huesos pertenecen a esta difunta y las circunstancias en las que murió esta supuesta vecina de la localidad.

Los operarios encontraron dichos restos humanos al derribar el falso techo de la vivienda, situada en la calle San José del municipio, durante unas obras de rehabilitación. Entre los escombros y las cañas cayó una cesta de mimbre medio rota, en cuyo interior había un esqueleto humano. A simple vista, y sin tocar nada, los trabajadores se percataron de que había un cráneo partido y dos fémures.

Rápidamente telefonearon a la Policía Local de Almàssera informando del hallazgo, quienes a su vez alertaron a la Guardia Civil. Eran

aproximadamente las dos de la tarde de ayer cuando agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Moncada se hicieron cargo de los huesos para tratar de determinar su origen.

Tras una inspección ocular del lugar, los agentes también hallaron una inscripción en un pilar, a la altura del falso techo, en el que podía leerse: «Día 6 de julio de 1853 se metieron los huesos de Clareta Peris». En torno a las cuatro de la tarde los restos humanos

fueron llevados al Instituto de Medicina Legal para ser analizados.