El barrio de la Coma dispondrá de dos orientadores laborales, a través de la ayuda de 200.000 euros que la conselleria que dirige Mònica Oltra ha aprobado para el proyecto de «Reinserción Laboral de jóvenes». El ayuntamiento estudia, además, extender el modelo en otros barrios.
El concejal de Desenvolupament Humà, Juanma Ramón, valora que «el gobierno del Batà está sentando las bases sobre las que, con la ayuda del resto de administraciones, colectivos sociales del barrio y vecinos y vecinas, construir un futuro de esperanza para la Coma».
El perfil del destinatario de este proyecto se corresponde con el de la población considerada en situación de exclusión social: personas del barrio que se encuentran en situación de carencia y que se puede manifestar en diferentes aspectos que se concretan en la pérdida de calidad de vida. La iniciativa irá a personas que viven «una situación de exclusión muy grave, en ámbitos como el laboral, la salud, la protección social o el acceso a la cultura, lo cual les impide desarrollar una vida normalizada».
Servicio «imprescindible»
Por eso consistorio y consellería consideran «imprescindible» realizar esta intervención en la Coma, un barrio donde valoran que gran parte de la juventud se encuentra en peligro de exclusión. Los beneficiarios del servicio de orientación laboral serán jóvenes de entre 16 y 30 años por considerar que este colectivo es el que menos atención específica está teniendo y sobre el que más impacto puede tener.
