Las fuertes lluvias que azotaron la comarca la tarde noche del domingo dejaron ayer a más de 450 alumnos sin clase al inundarse las instalaciones de los dos centros en los que estudian en Aldaia y Puçol. La previsión es que abran hoy. Esta fue la incidencia más destacada, además de anegarse los pasos inferiores de más de media docena de municipios.

El alcalde de Aldaia, Guillermo Luján, decretó la suspensión de las clases en el colegio el CEIP Rajolar, íntegramente en barracones, porque la tormenta causó daños tras entrar el agua por el techo y el sistema eléctrico. Mandatario y técnicos consideraron que la infraestructura era peligrosa en ese estado tanto para el alumnado „unos 190 estudiantes„ como para la plantilla de docentes y otros trabajadores. El que se libró del temporal fue el CEIP Cremona, en Alaquàs, tan afectado en otras ocasiones, por la instalación de una doble cubierta el año pasado.

Menos suerte se registró en el CEIP Lluís Vives de Puçol. La filtración de agua por el techo, el deslunado y la entrada obligó a cerrar las aulas, aunque los profesores tuvieron que quedarse con medio centenar de los 250 niños matriculados cuyos padres no podían tenerles a su cuidado. Los municipios de la comarca con pasos subterráneos registraron las habituales inundaciones que obligaron a clausurar los túneles ya la noche del domingo. Ayer los operarios municipales trabajaban a destajo para tratar de volver a reabrirlos.

Los tres túneles de Aldaia, bajo las vías del tren, quedaron anegados, con lo que la población estuvo casi aislada. En Catarroja se cerraron los pasos inferiores de Pelai, Camí de les Corregudes, el acceso a la Rambleta por la Ronda Nord y la Ronda Est, el único que permanecía cortado a última hora. También Alfafar mantuvo clausurados al tráfico los túneles inferiores de la Pista de Silla; y Xirivella los abrió a primera hora de la mañana. En Quart, un vehículo quedó atrapado por el agua en el paso subterráneo de la avenida 9 d'Octubre, que conecta con el barrio del Cristo, sin lamentar daños; al igual que otro conductor tuvo que ser rescatado por la grúa en el túnel de Rafelbunyol.

Las trombas también cortaron calles en Paiporta y Sedaví, donde los bomberos achicaron medio metro de un garaje. En Mislata, el agua entró en la piscina cubierta a través de la puerta de emergencias del colegio Jaume I, lo que ha obligado a cerrarla durante dos días para limpiar el barro acumulado.