Con una réplica de un tren de finales del siglo XIX que han hecho funcionar con un mando a distancia, los alcaldes y alcaldesa de los municipios de la línea C-3 de RENFE han escenificado su protesta contra el Gobierno de Rajoy por lo que consideran una inversión indecente para 2017, los 12.700 euros que aparecen en el proyecto de presupuestos. A la protesta, celebrada en la explanada de la Estación del Norte, han acudido también diversos ediles de los municipios, el director general de Transportes, Carlos Domingo y el subsecretario de la Vivienda y Obras Públicas, Francesc Signes, así como representantes de la Plataforma por el Transporte Público de l'Horta Sud y sindicalistas de CGT.

El alcalde de Xirivella y portavoz del grupo, Michel Montaner, ha tomado la palabra para expresar que desde el 31 de julio de 1883, cuando se inauguró la línea, hasta el día de hoy, las mejoras en modernización han sido "casi nulas". El mandatario ha advertido a Fomento de que no piensan parar en las acciones reivindicativas hasta que lleguen "inversiones de modernización reales". "Queremos un transporte moderno, rápido, sostenible y lo más barato posible y tenemos todo lo contrario", ha manifestado

"Iremos al Paseo de la Castellana, si hace falta, a la puerta del Ministerio de Fomento, para reclamar lo que es de justicia", ha expresado Montaner, además de haber repasado otros agravios en materia de inversiones del Gobierno central en transporte público para la Comunitat Valenciana, como el llamado contrato programa para los servicios metropolitanos. "No lo vamos a consentir", ha expresado.

Por su parte, Francesc Signes ha pedido a Rajoy que "deje de odiar a los valencianos" tras calificar de "castigo y burla" las inversiones en infraestructuras previstas para 2017. El el subsecretario de la Vivienda y Obras Públicas ha insistido en que el ministro tiene desde hace meses un documento que recoge las necesidades en infraestructuras en la Comunitat Valenciana y ha indicado que tratarán de conseguir las más prioritarias a través de las enmiendas a los presupuestos.

Carlos Domingo ha destacado que no sólo la C-3 apenas ha mejorado sino que el servicio ha empeorado en los últimos años ya que para recuperar la conexión con el centro de Valencia (suspendida por las obras del AVE hace una década) el tiempo de trayecto ha aumentado en 30 minutos. El director general estima una inversión necesaria de 3.000 millones de euros en las líneas de Cercanías y ha recordado que la Generalitat Valenciana pidió hace años asumirlas para modernizarlas pero ni ha habido respuesta ni tampoco se realizan las inversiones necesarias.

Por su parte, el representante de la Plataforma vecinal, Paco Magro, ha criticado que municipios que lindan con Valencia tengan unos tiempos de trayecto de 30 minutos hasta la Estación del Norte cuando el tren es, en el caso de Alaquàs, Aldaia y Xirivella, el único medio de transporte que podría ser seguro y eficaz, ya que los municipios no disponen de metros. Y desde CGT, Mar Aguilar ha denunciado la escasa inversión en Cercanías, tanto en calidad como en seguridad, con lo que el sindicato teme que en la revisión del servicio prevista para 2017, si se detecta una caída de usuarios, aún se reduzcan más las frecuencias o se cierren estaciones.