El reto surgió en 2014 cuando Patricia Pardo esbozó lo que sería "El fandango de Marx", la obra con la que celebra los diez años de su compañía y con la que ha ofrecido cinco representaciones en el Rialto. Pero el "sueño" no pudo materializarse hasta la semana pasada, cuando la actriz incluyó en el montaje a la Banda Simfònica de la Unió Musical d'Alaquàs, donde tiene parte de sus orígenes artísticos.

De hecho, "El fandango de Marx" está repleto de referencias de su infancia por las calles de Alaquàs. Primero en el barrio de la Santa Creu y después en el colegio Bonavista, al que para llegar tenía que atravesar solares, campos y una acequia, pero donde tuvo su primer contacto con el mundo del arte, a través de la extraescolar de rondalla. La obra combina el humor con una dura crítica social sobre el aburguesamiento de la sociedad o la realidad de las personas que llegan a las costas pidiendo auxilio, entre otros temas, y también integra diversas técnicas escénicas, desde las acrobacias hasta el clown, con acompañamiento de guitarra y canto de fandangos en directo.

En un momento dado, el personaje que interpretaba la actriz recordó su paso por la banda y un telón se levantó para mostrar sobre escenario a más de treinta músicos, que fueron interpretando temas populares, dirigidos por Enric Parreño. En la apoteosis final, el propio presidente de la UMA y trompeta Lute Fernández, fue la sorpresa al interpretar en directo una versión de "La Malaguenya de Barxeta", que arrancó una ovación del público, mayoritariamente de la población.

Al término de la representación, Patricia Pardo expresaba que estar en el Rialto "significa trabajar en nuestra comarca, una cosa que hacemos poco habitualmente". Además, destacó la "gran afluencia de público" que ha tenido la obra, "en parte por trabajar con la banda". "Creo que es muy interesante combinar dos artes escénicas como el teatro y la música popular. Para mí ha sido un regalo".

Pardo destacó que eligió la UMA, no sólo porque sus inicios fueron allí sino porque "hay músicos amateurs pero la Banda Simfònica va mucho más allá del amateurismo y hace actividades con otros profesionales, graban discos, o sea, que no solo hacen pasacalles y procesiones, que también está muy bien y no hemos de renunciar a esa tradición que tienen las bandas". Y respecto a los planes futuros, la actriz indicó que pretende "hacer gira con esta obra por aquí, por poblaciones valencianas porque hemos estado fuera y ahora queremos trabajar aquí". Más adelante se plantea hacer una producción nueva y colaborar con otras compañías. "En definitiva resistir, que es suficiente en nuestro trabajo, si nos dejan, y aunque no nos dejen lo haremos", insistió.

Por su parte, Lute Fernández consideró la experiencia "una maravillla" porque "estar en un escenario como el Rialto está muy bien como experiencia musical". "Agradecemos a Patricia haber contado con su banda porque ella es una de los nuestros y estamos felices. Esperamos volver a repetir la experiencia en Alaquàs y donde haga falta", concluyó.

Y el director de la banda, Enric Parreño, indicó que participar en la obra "era un reto porque es un escenario en el que no estamos habituados pero lo asumimos con mucha ilusión". El experto indicó que han adaptado a banda la música del montaje inicial para guitarra. "Esa era la complejidad y también saber estar en un escenario, seguir un pie de texto y otras cosas. La experiencia ha valido la pena", manifestó.