El instituto de vida consagrada «Iesu Communio» erigido en 2010 en la diócesis de Burgos, donde cuenta con más de 200 jóvenes religiosas de vida contemplativa, de las que más de 20 son valencianas, ha elegido la diócesis de Valencia para abrir su primera comunidad fuera de su ciudad de origen.

El Arzobispado de Valencia confirma que el lugar en que se establecerá esta comunidad es el antiguo monasterio de las religiosas Salesas de Godella y que la misa de acción de gracias con las religiosas será el 10 de junio en el Seminario de Moncada. La iglesia valenciana les ofreció el monasterio de Godella, cuya comunidad de religiosas salesas había dejado el pasado mes de marzo el edificio.

Las religiosas de «Iesu Communio» han anunciado que «deberán realizar algunas obras de mejora para cumplir la ley y adaptarse a la nueva realidad», según fuentes del propio instituto de vida consagrada, que confían en que pueda establecerse en Godella una comunidad de 50 personas.