La conselleria de Sanitat ha atendido las reclamaciones de Manises y dispensará la metadona en el centro de salud al que pertenece cada paciente. La medida entrará en vigor el próximo uno de octubre y no el próximo martes como estaba previsto. Además, el ayuntamiento manisero ha desconvocado la protesta que había programado este mediodía.

El acuerdo pone fin a varios días de polémica después de que el consistorio recibiera una comunicación de la concesionaria del hospital de Manises, informando de que a partir del 1 de agosto el centro de salud manisera sería el encargado de dispensar la metadona a todos los pacientes los 14 municipios que conforman el área de salud.

El ayuntamiento mostró su rechazo público a la medida criticando que «no parece que sea la solución más adecuada, ni para los destinatarios, ni para el resto de usuarios del centro. Debido a las reducidas dimensiones del mismo, es fácil prever que la convivencia de pacientes con las características de los usuarios de metadona con el resto de usuarios del ambulatorio será fuente de conflictos que redundarán en un empeoramiento del funcionamiento del centro». Tal era el malestar municipal con el alcalde Jesús Borràs al frente que, ante la falta de diálogo con la conselleria, que el miércoles al mediodía convocaron para hoy una concentración de protestas a las puertas del citado centro de salud.

La presión parece que surgió efecto, ya que, por la tarde el gobierno de Manises mantuvo una reunión con la consellera Carmen Montón y el secretario autonómico, Narcís Vázquez, para desbloquear la situación. Tras varias horas de conversaciones, Sanitat accedió a las pretensiones de Borràs y ayer por la mañana recibió la comunicación oficial por escrito de que cada centro de salud dispensará la metadona a sus pacientes a partir del 1 de octubre.

«Era lo lógico. La gente tiene que estar en condiciones dignas y lo normal es que cada paciente acuda a su centro de salud», explicaba el alcalde, que agradeció a la conselleria «que retomara el diálogo para llegar a un acuerdo». En este sentido, el consistorio manisero mostró a Sanitat su «total disposición para seguir trabajando por la dignificación de la sanidad para toda la ciudadanía».