El Ayuntamiento de Godella, representado por su alcaldesa Eva Sanchis, ha participado los días 19, 20 y 21 de octubre en la reunión anual y Cumbre de Alcaldes del Pacto de Milán, que se celebró en Valencia con el objetivo de intercambiar información sobre el progreso en la aplicación de políticas alimentarias sostenibles en cada ciudad.

Las ciudades firmantes del Pacto de Milán -al cual se adhiere Godella- han aprobado una Declaración de Valencia en la que se hace un llamamiento a «incluir iniciativas sostenibles y aplicables en los sistemas de alimentos locales de las ciudades y que también fortalezcan los vínculos rurales y urbanos integrales para el desarrollo sostenible». Este llamamiento va dirigido a «la ONU y todas sus agencias, gobiernos regionales, nacionales y locales, sociedad civil, socios nacionales e internacionales para el desarrollo, sector privado y a todos los ciudadanos comprometidos».

La Declaración de Valencia recuerda que en el Pacto de Milán, subscrito por ya por 159 ciudades firmantes de todo el mundo que representan a más de 450 millones de habitantes, se aboga por «sistemas alimentarios sostenibles que sean inclusivos, seguros y diversos, que proporcionen alimentos saludables y asequibles a todas las personas en un marco basado en los derechos humanos, que minimicen los residuos y conserven la biodiversidad al mismo tiempo que se adaptan y mitigan los impactos del cambio climático».

En esta cumbre de ciudades, más de 300 alcaldes, delegados y expertos se reunieron en el Palacio de Congresos para fortalecer el diálogo entre ciudades, territorios, gobiernos nacionales y organizaciones internacionales sobre sistemas de alimentación sostenible, y hacer un llamamiento, recogido en la Declaración de Valencia, «para que se reconozca la implementación de la agenda de Desarrollo Sostenible de 2030 en los esfuerzos pasados, actuales y futuros de las ciudades para: erradicar la pobreza y promover la prosperidad en un mundo cambiante; avanzar hacia sociedades sostenibles y resistentes; empoderar a las personas, garantizar la inclusión y la igualdad y concienciar y fomentar estudios que contribuyan al logro de estas finalidades».

Las ciudades firmantes del Pacto de Milán hacen este llamamiento desde la convicción que «los gobiernos locales y territoriales son clave para conseguir progresivamente el derecho universal a la alimentación y para una vida de paz, dignidad y prosperidad para todos». En la Declaración de Valencia los gobiernos locales y territoriales señalan que no quieren quedar atrás ni fuera de los procesos desarrollados dentro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la Nueva Agenda Urbana (NAVE), adoptada por los estados miembros de la ONU en octubre de 2016. «Estos procesos tienen que incluir formal y completamente en los actores urbanos y territoriales, ampliando así los enfoques de gobernanza».