Tras dos años de descensos en los ingresos por el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), la comarca ha vuelto a hacer llenar la caja con el catastro. Si en 2014, la recaudación global ascendió a 197 millones y en 2015 cayó a 194,7, el cierre de la liquidación de 2016 arroja una subida de dos 'kilos', situando el montante total en 196.667.065 euros.
Esos 196,6 millones de euros ingresados por los ayuntamientos en 2016 corresponden a la cuota líquida del recibo del IBI, que es la cantidad que debe ingresar el «sujeto pasivo» -en este caso, los consistorios- una vez aplicadas las deducciones, bonificaciones o determinadas adiciones o coeficientes multiplicadores previstos. En total, se emitieron en la comarca el pasado año, 553.166 recibos (3.175 menos que en 2015) correspondientes a viviendas, garajes, locales comerciales o naves industriales. Si esta cuota líquida se divide por el número de recibos cobrados cada uno de estos recibos le ha supuesto a los ayuntamientos de l'Horta un ingreso de 355,5 euros, cinco más que el ejercicio anterior, que cabe recordar era año electoral.
En total, 18 municipios obtuvieron en 2016 más ingresos de media que en el curso anterior, mientras que 25 perdieron dinero. Como suele ser habitual, Beniparrell ostenta la media más alta de recibo con 922 euros, 51 euros menos que en 2015. Pese a solo tener 2.129 recibos, su polígono industrial le permite ingresar 1,9 millones. Salvando las distancias, algo similar le ocurre a municipios industriales como Albuixech o Massalfassar, con una media de 522 y 476 euros, respectivamente.
Por detrás de Beniparrell, se sitúa Godella con un ingreso medio de 638 euros, diez más que en 2015; Rocafort con 509 euros, 27,6 más que en el ejercicio anterior; y Alboraia con 495 euros, seis más.
En el lado opuesto, se encuentran Emperador, con solo 454 recibos y unos ingresos globales de 74.000 euros, a una media de 163,1 por recibo; Xirivella, con 218,8 euros, 2,7 menos que en 2015; Albalat del Sorells con 252,7 euros, ocho menos que un año antes; y Mislata con 255,7, solo un euros más.
Respecto a lo que supondrán los ingresos del año en curso, el gravamen que aplican los ayuntamientos sobre el IBI sube en solo media docena de pueblos, baja en ocho y 29 lo mantienen igual.En este sentido, el tipo impositivo más bajo se mantiene en 2017 en Beniparrell, Sedaví y ahora Massamagrell con el 0,40.
