El alcalde de Torrent Jesús Ros ha lamentado el incidente que afectó a su secretario y cargo de confianza Eduardo Gómez, cuando el pasado fin de semana dio positivo en un control de alcoholemia de la Policía Local, en el que más duplicó la tasa mínima permitida. El caso ha generado un enorme revuelo local y especialmente en las redes sociales. El asunto también ha generado malestar en el seno del partido, donde algunas voces afirman en privado que «debería ser sustituido».

Ante la situación, Jesús Ros ha manifestado a este diario que dará una oportunidad al asesor porque «sin quitarle ni un ápice de gravedad al asunto, toda persona merece que le den una segunda oportunidad». No obstante, el veteramo mandatario asegura que le ha dejado claro que «una cosa así no puede volver a pasar».

El incidente se produjo a las cinco de la madrugada del pasado sábado en uno de los dispositivos instalados en la capital de l'Horta Sud durante los fines de semana. Una patrulla de la Policía Local paró a Gómez quien arrojó una tasa de 0,62 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, en la primera medición, aunque en la segunda dio 0,59, lo que convirtió el hecho en una infracción administrativa y no en un delito.