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Patrimonio

Almàssera autoriza derribar una fábrica que era símbolo del estilo de los años 50

Un experto denuncia en Patrimonio el caso y pide que se paralice la demolición - Albergó un laboratorio y cerró su actividad en el año 2009

Almàssera autoriza derribar una fábrica que era símbolo del estilo de los años 50

Uno de los casos más representativos de la arquitectura del movimiento moderno valenciano está a punto de desaparecer si no interviene ninguna institución. Como ha ocurrido con otros exponentes del patrimonio industrial, el Ayuntamiento de Almàssera ha autorizado el derribo de la nave que albergó en los años 50 la firma Laboratorio Aurelio Gamir y que posteriormente estuvo en activo hasta el año 2009, bajo el nombre de Rottapharm, sociedad que la había comprado en 1989. Desde entonces el edificio estaba cerrado, había sido saqueado y ocupado.

Operarios realizaron ayer los primeros trabajos preparatorios en el recinto de la empresa para su posterior demolición. En concreto, retiraron las ventanas.

De forma paralela a la tramitación de este permiso, un experto denunció en la Inspección de Patrimonio el caso hace unas semanas y solicitó la paralización del derribo por los valores que considera que tiene el edificio. Hasta la fecha, la Conselleria de Cultura no se ha pronunciado. También este particular solicitó que el edificio fuera protegido y que se modificara el PGOU de Almàssera para que toda su superficie quede como suelo industrial ya que gran parte está fuera de ordenación. Esta situación impide el desarrollo de actividades y posiblemente es la causa de que sus propietarios actuales se planteen demolerla.

El inmueble objeto de este conflicto data de 1958, según la denuncia presentada ante Patrimonio, y fue diseñado por los arquitectos Pablo Navarro Alvargonzález y Julio Trullenque Sanjuán.

Los valores culturales del inmueble hay que buscarlos en el hecho de que Navarro viajó en los años 50 a Alemania para conocer de primera mano la arquitectura moderna del país por lo que este edificio fue un ensayo «del conocido y emblemático» colegio Alemán, de los mismos autores. La nave está ubicada en la antigua Carretera de Barcelona.

El experto señala que en el archivo de Almàssera consta que el edificio se amplió en 1971y posiblemente se levantó la característica pasarela, con lo que el recinto se asemejó aún más a la Bauhaus de principios del siglo XX.

El consistorio valoró proteger todo el conjunto industrial en los años 80 y, de hecho, el inmueble figuraba en el avance del catálogo que elaboraron expertos, pero nunca llegó a entrar en vigor. El PGOU dejó una parte fuera de ordenación como reserva viaria de una infraestructura que luego se descartó.

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