Los alumnos y alumnas del CEIP Cervantes que no cabían en el comedor y tenían que desplazarse a un restaurante del pueblo tutelados por un grupo de monitores- a cargo del ayuntamiento- cada día para beneficiarse del servicio de comedor podrán volver a hacerlo en su centro escolar. El consistorio ha invertido 5.000 euros en ampliar la capacidad del comedor escolar con unos bancos auxiliares construidos en el exterior y con esta medida se calcula que se podrá atender a unos 40 niños que comían fuera de la escuela por falta de espacio. Para evitar futuros problemas parecidos, el ayuntamiento ha solicitado a la Conselleria a través del Pla Edificant la ampliación por obras del comedor y la cocina del centro.
ÚLTIMA HORA
Conciertos de Viveros 2024 en València: quién actúa cada día
La Pobla de Farnals